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La producción industrial logró por segundo mes consecutivo un crecimiento mensual , impulsada principalmente por el dinamismo de la actividad manufacturera, de acuerdo con los datos más recientes dados a conocer por el Inegi.
El indicador mensual de la actividad industrial registró un aumento real de 6.9% en el séptimo mes de este año respecto al mes previo, con base en cifras ajustadas por estacionalidad, luego de que en junio alcanzará un incremento mensual de 17.9%, producto de la reapertura de algunas actividades productivas estratégicas.
Los principales factores ayudan a explicar esta dinámica: son los esfuerzos adicionales para retomar actividades a la vez que se mantienen medidas sanitarias y de distanciamiento en el trabajo; además de cierto impulso de la demanda externa, sobre todo desde Estados Unidos, comentó Juan Carlos Alderete, director de análisis económico de Banorte.
Por componentes, las industrias manufactureras se incrementaron 11% a tasa mensual, constituyéndose en el principal motor de la reactivación. De las 21 actividades que comprenden el sector, 20 tuvieron variaciones positivas, destacando fuertes alzas en el sector textil: productos de cuero y piel con un incremento mensual de 40.7%; prendas de vestir, 36.5%; y productos textiles, 32.8%.
De las industrias de mayor peso, el equipo de transporte mejoró en 25.8%, la industria alimentaria lo hizo en 0.9% y la industria química en 4.4%. Hasta ahora tres de las 21 actividades, con un peso conjunto del 30% entre las manufacturas, ya registran una producción superior a la existente antes de la pandemia: la industria automotriz con alcanzó un incremento de 13.0% respecto a marzo de 2020, el equipo de computación, 4.1% y las bebidas y el tabaco, 3.6%.
En general, los especialistas estiman que estas actividades han sido más exitosas en ajustarse a la “nueva normalidad” debido a la posibilidad de producir sin tener contacto con clientes y porque la demanda por sus bienes no ha estado tan afectada, sobre todo aquellos más ligados al sector exportador.
Por otro lado, y en línea con lo esperado, la construcción también mejoró, aunque en mucho menor magnitud, subiendo 0.9%. La edificación reportó un alza mensual de 0.8%, por lo que sigue relativamente mejor que ingeniería civil, con esta última cayendo 0.3%.
Mientras tanto la minería, también mostró un avance mensual marginal de 0.9%, aunque con el sector petrolero todavía débil luego de tres meses en contracción. Por su parte, la minería no petrolera se ubicó en 8.8% tras ganar 24.1% el mes previo.
Pese a la recuperación mensual de julio, la producción industrial en general se mantiene 11.6% por debajo del nivel reportado un año antes.
Por sectores de actividad económica, la construcción disminuyó 23.7%, las Industrias manufactureras -9.5%, la generación, transmisión y distribución de energía eléctrica, suministro de agua y de gas por ductos al consumidor final -8.8% y la minería -3.0%.
“La sorpresa al alza en las cifras de actividad industrial durante julio es una noticia positiva para la economía en medio del contexto de incertidumbre. Sin embargo, los desempeños alentadores siguen restringiéndose a un grupo selecto de actividades, por lo que habrá que mantener la cautela respecto al arrastre que el dato pueda tener sobre el resto de la economía y los resultados de los meses siguientes”, comentó Daniel Arias, analista económico de grupo financiero Monex.
vcr
