En agosto y septiembre de este año la recuperación de la economía mexicana se desaceleró, luego del fuerte rebote en junio a consecuencia de la reapertura de actividades estratégicas en medio de la emergencia sanitaria.
El Inegi estimó una variación anual negativa del Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) de 7.9% en agosto y de 6.9% en septiembre, con relación al mismo periodo del año anterior, señalan los resultados del nuevo Indicador Oportuno de la Actividad Económica (IOAE).
Las contracciones a tasa anual de la economía estimadas por el Inegi tienden a ser menos profundas a las caídas de 21.6%, 14.6% y 9.8% reportadas en mayo, junio y julio, respectivamente, lo que supone cierta mejoría en la actividad económica.
Sin embargo, dicha recuperación tiende a ser menor. Tomando en cuenta dichas estimaciones, la variación mensual de la economía habría sido de 2.1% en agosto y 1.0% en septiembre, tasas menores al repunte de 8.8% y 5.7% de junio y julio, en ese orden.
Gerardo Leyva, director general adjunto de Investigación del Inegi, aclaró que el instituto no reporta el modelo del IOAE en variaciones mensuales, pues sería técnicamente menos robusto.
“Si los usuarios deciden usar las series en niveles o las tasas anuales para inferir las variaciones mensuales, lo harían bajo su responsabilidad”, afirmó.
Sin embargo, reconoce que “para fines de formarse una idea de por dónde andarán las variaciones mensuales, estarán cerca de lo que se lograría bajo un abordaje más formal, pero el instituto no valida esos cálculos”.
Agenda sigue
Tras la aprobación de la Ley de Ingresos y la Miscelánea Fiscal 2021 en la Cámara de Diputados, el secretario de Hacienda y Crédito Público, Arturo Herrera, dijo que no hay que esperar a que se termine la pandemia para seguir empujando la agenda del país.
Durante su participación en la Reunión Nacional de Consejeros Regionales 2020 de BBVA pidió al Congreso atender la reforma de pensiones que envió hace tres semanas porque generará importantes recursos necesarios para la inversión, y a los bancos seguir impulsando el financiamiento.
Estimó que si bien en el tercer trimestre la economía tuvo una caída de 8.2% como se esperaba, hay signos de recuperación, pero es importante contener la pandemia, por lo que no hay que esperar a que se vaya el Covid-19.
Respira el empleo
El Inegi también informó que se incorporaron 621 mil personas a la población económicamente activa durante septiembre.
De esta forma, de los 12 millones de personas que salieron del mercado laboral en abril pasado, han regresado 8.4 millones, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo Nueva Edición (ENOEN).
Conforme a la evolución de la pandemia del Covid-19 en el país, se mantienen las medidas para la reactivación gradual de los negocios y empresas en actividades económicas no esenciales, por lo que en septiembre de 2020 la población ocupada resultó en 51.1 millones de personas, un alza de 670 mil respecto a agosto.
A diferencia de meses previos, las ganancias laborales se concentraron en el sector formal (63.4% del total), resultando en una menor tasa de informalidad, de 54.9%, contra el nivel de 55.1% reportado en agosto.
Las personas ocupadas con la necesidad y disponibilidad de ofertar más tiempo de trabajo de lo que su ocupación les demanda pasaron de 8.6 millones en agosto a 8.0 millones en septiembre, es decir, 583 mil personas menos, con lo que la tasa de subocupación llegó a 15.7%, inferior en 1.4 puntos a la de agosto.
La población desocupada fue de 5.1% en septiembre y 5.2% en agosto como proporción de la población económicamente activa; el porcentaje equivale a 2.7 millones de personas el mes pasado.
La Población No Económicamente Activa (PNEA) disponible para trabajar, es decir, que no trabajó ni buscó trabajo pero que aceptaría uno, fue de 10.5 millones, lo que representa 24.4% de la PNEA. En comparación con agosto de 2020, la situación de la PNEA disponible para trabajar disminuyó en 190 mil personas durante septiembre.
