La farmacéutica Sanofi está corriendo las pruebas de validación y fabricando los primeros lotes de la vacuna contra la influenza en la planta de Cuautitlán Izcalli, Estado de México, para obtener la aprobación por parte del gobierno federal.
De esta manera, la producción de la vacuna podría iniciar en 2023, un año antes de lo previsto. Para este proyecto invirtieron 130 millones de euros.
Sanofi es el principal proveedor de la vacuna contra la influenza en el país. Este año vendió 35 millones de dosis del biológico al gobierno.
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“El plan sería anticipar la producción para 2023. La planta ya está aprobada, estamos en el proceso de validación de los primeros lotes de fabricación con Cofepris para obtener la respectiva aprobación y seguir con la producción a escala industrial”, dijo David Pinho, director general de Sanofi México, en entrevista con EL UNIVERSAL.
El directivo destacó que de los 205 millones de unidades de fármacos que se venderán en 2022, 85% se fabrican en el país y, de esos 205 millones de unidades, 35 millones corresponden a vacunas contra la influenza.
“Somos la más mexicana de las multinacionales farmacéuticas porque tenemos plantas para la manufactura de nuestros productos”, apuntó Pinho.
El laboratorio tiene capacidad de suministrar hasta 90 millones de dosis contra la influenza en caso de pandemia y tiene otras 13 vacunas para distintos tipos de enfermedades.
Pinho comentó que este año el mercado farmacéutico crecerá 10% en ventas respecto a 2021, ya que se está empezando a moderar el consumo de medicamentos después del pico que se presentó durante los primeros años de la pandemia.
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De las cuatro unidades de negocio, medicinas generales es la más grande, con 40% de las ventas; seguida de vacunas, con 28% del negocio; consumo, 27%, y alta especialidad, con 5%.
Los medicamentos de alta especialidad y consumo están creciendo a tasa de doble dígito.
Esto coloca a Sanofi como la farmacéutica más grande del país, con ventas superiores a 15 mil millones de pesos.
En Europa, la compañía ya obtuvo la aprobación de su vacuna contra Covid-19, la cual sirve como refuerzo contra nuevas variantes del virus y para personas que se aplicaron una vacuna de cualquier tipo. México formó parte de los estudios clínicos de esta vacuna, pero al momento no hay indicios de que se vaya a aplicar en el país.
Inflación
Como cualquier otra empresa, Sanofi no ha estado exenta de la inflación en los insumos para fabricar medicamentos.
La compañía busca alianzas de largo plazo con sus proveedores, al tiempo que compra más volumen para equilibrar la ecuación de la inflación.
“Establecimos medidas de equilibrio y optimización. Estamos buscando un uso más racional de nuestros recursos, en impresión, en energía con un plan de sustentabilidad que está dentro de nuestro comité de responsabilidad social”, explicó.
“Queremos aumentar la sustentabilidad del negocio buscando opciones más verdes que de manera indirecta contribuyan a un equilibrio de gastos”.
Para apoyar a pacientes, Sanofi lanzó en junio un programa a través del cual los enfermos de diabetes con alguna necesidad económica pueden ser validados por Deloitte para adquirir su medicamento a un precio más accesible que en una farmacia.
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