El aguinaldo, la gratificación de fin de año que seguro ya te llegó. Sin duda, esta prestación ofrece a quienes la reciben una holgura económica para pasar las fiestas de fin de año sin preocupaciones.
El aguinaldo permite dar un apapacho al bolsillo o bien consentirnos a nosotros y a nuestros seres queridos con algún regalo. Y más ahora que, de acuerdo con especialistas, el poder adquisitivo del dinero se ha visto mermado, debido a la inflación que lleva cinco meses seguidos por arriba de 8%, nivel no visto desde hace dos décadas.
El actual entorno económico no es de los más idóneos para guardar parte de la prestación, así lo saben los expertos.
“Puede que haya familias que incluso ya deben el aguinaldo, pero ahorrar una parte de esta prestación es lo ideal”, considera Janneth Quiroz Zamora, subdirectora de Análisis de Monex.
Para Luis Adrián Muñiz, subdirector de Análisis de Vector, los hogares pobres tienen una mayor proporción marginal a consumir y “se queman todo el aguinaldo”, mientras aquellos con más recursos podrán ahorrar una parte.
Y es que de acuerdo con Juan Luis Ordaz, director de Educación Financiera de CitiBanamex, “buena parte de los mexicanos no acostumbran ver este recurso extra como oportunidad para estabilizarse financieramente y prefieren gastarlo en festividades”, explica.
Una investigación que cita el especialista es la de la consultora de mercados Kantar.
Datos de la firma indican que el año pasado 70% de las personas ocupó parte de su aguinaldo en regalos y 68% lo hicieron para cenas y fiestas.
Para Ordaz, “al recibir este tipo de ingresos debemos de reflexionar y planear su destino. No se trata de privarnos de regalos, fiestas o reuniones, sino que se trata de tomar las mejores decisiones financieras para nosostros”, señala.
El blog de educación financiera de Citibanamex presenta algunas recomendaciones para hacer que sea más productivo el uso de esta prestación.
Divide y vencerás. Igual que la célebre frase de El arte de la guerra de Sun Tzu, la institución recomienda separar el dinero en tres partes, aunque no sean iguales. Primero lo que vas a usar para alguna emergencia, otra parte para usar en los festejos navideños y regalos, y por último la que emplearás para darte algunos gustos.
Elabora un presupuesto. El pilar de las finanzas personales es la elaboración de un presupuesto. En este caso, la institución financiera plantea elaborar una lista de los gastos a cubrir con el aguinaldo y apegarse lo más que se pueda a la lista.
Paga tus deudas. Una forma de hallar el equilibrio financiero es el hecho de saber que no tienes deudas. Sin duda, recibir tu aguinaldo es quizá ese aire que requerías para que tu bolsillo respire.
“Si tu deuda es algo grande y no la puedes cubrir con el aguinaldo, puedes aprovechar y hacer un pago mayor a lo que normalmente abonas”, nos explica el blog de CitiBanamex.
“Solventar los adeudos es el primer paso para el desahogo financiero”, explica Ordaz.
Haz crecer tu dinero. De acuerdo con la institución financiera, si uno de tus propósitos es generar más dinero o ahorrar para irte de viaje, comprarte una casa o un auto, la prestación puede ser la indicada para que “al menos una parte de tu aguinaldo sea una oportunidad para comenzar e incluso hacerlo crecer para que te alcance para algo mucho mejor de lo que pensabas”.
El director de Educación Financiera de CitiBanamex explica que el proceso para la inversión se ha simplificado mucho, pues en la actualidad no es necesario tener grandes sumas de dinero. “Actualmente existe un amplio abanico de posibilidades para hacer crecer tu dinero. Desde Cetes y Pagarés hasta fondos de inversión, mantente informado y elige lo más adecuado para ti. ¡Puedes empezar desde 100 pesos!”, aconseja.
Suscríbete aquí para recibir directo en tu correo nuestras newsletters sobre noticias del día, opinión, Qatar 2022 y muchas opciones más.