En la emisión de un nuevo billete hay detrás mucho tiempo de planeación y el trabajo de expertos encargados de su diseño.
Para valorar más las piezas nuevas que el Banco de México ( Banxico ) puso en circulación el año pasado, te cuenta que hay detrás de este proceso.
Lo primero que hay que recordar es que Banxico se encarga de diseñar, emitir y poner en circulación los billetes que cambian de mano todos los días y que se usan como forma de pago.
Para saber más sobre esto, la dirección general de Emisión del Banco Central , que tiene como titular a Alejandro Alegre Rabiela, preparó un texto para contarlo.
Destaca que el diseño de los billetes que emite Banxico lo realiza un grupo de expertos , utilizando las herramientas tecnológicas más avanzadas.
Los diseñadores son los responsables de los trazos de las líneas, figuras, retratos y elementos artísticos que integran al billete y que luego son trasladados al sustrato de algodón o polímero, mediante máquinas de impresión.
Para los temas identificados, como sucede en el caso de la nueva familia de billetes, se eligen los procesos más relevantes de la historia de México y los ecosistemas que prevalecen en el territorio nacional.
Se hacen consultas con expertos de instituciones y centros de investigación, quienes proponen los motivos temáticos específicos a incorporar en cada denominación, es decir, los personajes, ecosistemas, ejemplares de flora y fauna y patrimonios.
Después, las propuestas generadas se someten a estudios de percepción con el público para conocer su potencial de aceptación y, como resultado de este proceso se seleccionan las mejor evaluadas y se ponen a consideración de la Junta de Gobierno del Banco Central, quien selecciona la temática final.
Para la emisión más reciente, que fue la denominación de mil pesos , se decidió representar en el anverso el proceso histórico de la Revolución Mexicana con Francisco I. Madero, Hermila Galindo y Carmen Serdán.
En el reverso, el ecosistema de selvas húmedas, con el jaguar y los árboles de la ceiba y el zapote, en la Antigua Ciudad Maya y bosques tropicales protegidos de Calakmul en Campeche, reconocida por la UNESCO como patrimonio natural y cultural.
Una vez seleccionada la temática, los diseñadores hacen una investigación iconográfica en fuentes documentales, fototecas, museos y reservas naturales, entre otros sitios, a fin de obtener las imágenes que serán la fuente de inspiración para el diseño, tomando en cuenta el mensaje que se desea transmitir, el tamaño del billete, la composición a plasmar y los colores asignados para cada denominación, entre otros aspectos.
Pero es común que los diseñadores tomen fotografías propias para contar con imágenes con la calidad requerida; en el caso del billete de mil pesos, se visitó el Museo Vivencial Ferrocarril 279 de Cuautla en el Estado de Morelos, el Museo de la Revolución Mexicana, también conocido como la Casa de los Hermanos Serdán en la ciudad de Puebla, la Antigua Ciudad Maya de Calakmul en Campeche, el Zoológico Miguel Álvarez del Toro (ZooMAT) en Tuxtla Gutierrez Chiapas, entre otros lugares.
Esta etapa es muy importante, señaló, porque permite al diseñador vincularse artística y emocionalmente con la temática a representar, con lo cual adquiere vivencias que enriquecen el proceso de diseño.
Cuenta que, para los encargados del diseño del billete de mil pesos, fue una gran experiencia estar inmersos varios días en la selva de Calakmul con expertos de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, para fotografiar las especies de flora y fauna y pirámides de Calakmul, así como lo fue el fotografiar a un jaguar en el ZooMAT.
También lee:
Ya de regreso con las imágenes seleccionadas, se elaboran diferentes bocetos del billete en los que se incorporan los elementos de seguridad, como el hilo dinámico, la denominación multicolor y la marca de agua para el caso de la denominación más alta de la nueva familia.
Así, los bocetos son evaluados a través de estudios de percepción para conocer las reacciones del público y después se presentan a la Junta de Gobierno, integrada por el gobernador y cuatro subgobernadores, quienes son los que autorizan el diseño final.
Luego, inicia el diseño detallado, que consiste en trazar línea por línea los fondos que darán color al billete, así como los grabados que le darán relieve, transformando así las imágenes en líneas, puntos y patrones únicos que lo protegen para dificultar su reproducción ilegal y a su vez lo hacen una obra de arte.
En este punto, los diseñadores experimentan con la paleta de color para lograr un diseño vistoso y armonioso, que facilite su distinción con respecto a otros billetes por parte de los usuarios.
El diseño del billete no acaba aquí, Banxico refiere, dado que es un bien que se produce industrialmente, es revisado desde el punto de vista técnico por un grupo de expertos en temas de fabricación y circulación de billetes, quienes evalúan su factibilidad de producción y con base en sus comentarios se hacen ajustes al diseño.
Señala que la evaluación de la factibilidad técnica, no sólo se basa en la experiencia, pues además se hacen pruebas en las máquinas de impresión, que permiten identificar ajustes finos a realizar en el diseño, así como probar los tonos de las tintas que darán colorido al billete sobre el sustrato de algodón o polímero que se usará en la producción.
Después de varios ajustes finales, el diseño del billete está casi concluido. El diseño unitario del billete se multiplica y se crea un archivo a partir del cual se fabricarán las láminas y planchas que se colocan en las máquinas de impresión.
Al mismo tiempo, los proveedores fabrican las tintas de seguridad y sustrato de algodón o polímero en las cantidades requeridas por el Banco de México.
Es en este momento cuando concluye el diseño para dar paso a una siguiente e interesante etapa, que es la producción de billetes.
También lee:
vcr/rdmd