Más Información
Videojuegos, el nuevo gancho del crimen para captar menores; los atraen con promesas de dinero y poder
Óscar Rentería Schazarino, ha operado contra CJNG, Viagras y Templarios; es el nuevo secretario de Seguridad en Sinaloa
Con una Beca para estudiantes de economía, el Colegio de México (Colmex) le rindió homenaje a Carlos Urzúa Macías, quien falleció en febrero pasado.
La beca que lleva el nombre de “Carlos Urzúa” servirá para apoyar los estudios en el extranjero de alumnos cuyos fondos aportados a la Fundación Colmex por exalumnos, se canalizarán a través del Centro de Estudios Económicos del colegio en donde como profesor formó a varias generaciones de economistas.
Durante la conferencia en honor a quien fue el primer secretario de Hacienda y Crédito Público (SHCP) del presente gobierno y renunció ocho meses después como por estar en desacuerdo con las políticas públicas sin sustento, excompañeros de trabajo, estudiantes y funcionarios que trabajaron con él o les dio clases, lo recordaron como un hombre con dignidad y honestidad.
Graciela Márquez, quien actualmente es la presidenta del Inegi, contó cómo fue notificada que había sido aceptada para realizar sus estudios de posgrado en el Colmex a través de un telegrama.
Lee también: Muere Carlos Manuel Urzúa, exsecretario de Hacienda de AMLO, a los 68 años
Ahí realizó su Maestría entre 1989 y 1991, coincidiendo con la llegada de Urzúa como profesor, de quien dijo “tuve el privilegio de haber tenido cinco cursos con él con clases que se prolongaban hasta cinco horas”.
Urzúa, quien también fue columnista de El Universal, como profesor le sugirió el tema para su tesina y la alentó para estudiar los índices a partir de los censos.
“Fue un profesor generoso, servidor respetuoso y como escritor tenía una pluma excepcional”, destacó.
Por su parte, su colega Héctor Villarreal lo recordó como un hombre muy inteligente que a pesar de que venía de una familia de mucho abolengo de Aguascalientes; tenía una sensibilidad muy especial con la gente humilde, por eso era un gran microeconomista.
“Keynesiano muy clásico en muchos sentidos, pero preocupado por el bienestar de los pobres; era un economista tan enciclopédico y destacado econometrista, que tenía obsesión por las estadísticas y que antes de ser matemático, quiso ser escritor”, expresó.
Villarreal manifestó que es difícil pensar en la modernización del cobro del predial en la Ciudad de México sin reconocer que fue autoría de Carlos Urzúa cuando fue secretario de Finanzas.
Lee también: Veinte distractores presidenciales
Beca Urzúa buscará incentivar a jóvenes
Mónica Zegarra, una de sus pupilas también de la Maestría en Economía generación 94-96, coincidió tenía un don especial para conectar con los jóvenes y una pasión por la formación de economistas.
“A raíz de su partida corroboré mi percepción de la generosidad, y calidad humana”, manifestó.
De ahí que consideró que se le podía rendir un homenaje aportando a una causa que seguramente él apoyaría, y fue así que la Fundación Colmex abrazó la iniciativa.
Durante el evento tres becarios recibieron este beneficio para que puedan seguir realizando sus estudios.
Urzúa disfrutaba dar clases
En su turno, el exsubgobernador del Banco de México, Gerardo Esquivel, también platicó sus anécdotas como alumno.
“Disfrutaba dar clases, le gustaba más la econometría y eso me orilló a estudiar econometría”, Su primera publicación en la revista económica del Colmex, se la debe a Urzúa.
Tal fue su pasión por la estadística econométrica, que logró implementar una prueba en los paquetes estadísticos, dijo.
Relató que el primer problema que resolvió en el gobierno de la CDMX, no fue por el metro, ni por otra cosa, sino con los trabajadores de la Tesorería que se resistían al cambio que dio una buena e importante recaudación local.
El simulador fiscal del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), fue creado con base a la idea de Carlos Urzía, refirió Raymundo Campos.
Entre el público, una mujer contó que el puente de los petas se logró gracias a la negociación de Urzúa al igual que el nombre porque le encantaba la poesía.
Emilio Barriga, quien llegó a ser Tesorero de la CDMX comentó que cuando daba clases les pedía a los alumnos que no le hablaran de usted ni que le dijeran doctor.
Al final del evento, su esposa, Laura Valverde agradeció todas las muestras de cariño y por la iniciativa de crear la Beca “Carlos Urzúa”.
rtd/mgm