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Jacques Rogozinski, director de Nacional Financiera (Nafin), consideró que hay áreas en las cuales puede haber sinergias para fusionarse con Bancomext y margen para que bajen las comisiones que cobran los bancos privados.
De darse la fusión, se tendría el quinto banco más importante en México, en términos de activos y mejores condiciones de financiamiento por las eficiencias y reducción de costos, consideró.
Aseguró que entregará a Eugenio Nájera Solórzano, quien fue nombrado por el nuevo gobierno como próximo director de Nafin, una institución bien capitalizada, sólida y prácticamente sin cartera vencida.
Rogozinski consideró que las sinergias para una fusión con Bancomext podrían darse en áreas como tesorería y recursos humanos.
Aunque comentó que se reunió con Nájera, quien le confirmó la fusión entre ambas instituciones de la banca de desarrollo, aún desconoce si será a través de un cambio legal o una unificación tipo holding.
“Sí puede haber sinergia en muchas áreas, hay pros y contras; el tema es cómo hacerlo”, manifestó, y destacó que viene del sector privado y que tiene experiencia en materia financiera, con capacidad para dirigir a la institución más importante de la banca de desarrollo.
Sobre las comisiones que cobran los bancos, afirmó qué hay espacio para reducirlas, pero se debe analizar la situación de cada institución financiera y por segmentos, porque al hacerlo a “rajatabla”, las empresas más pequeñas desaparecerán: “A un banco chico le cuesta más acceder al fondeo, en cambio, los grandes pueden ir a los mercados a colocar a un costo bajo”.
Aclaró que Nafin no tiene invertido “ni un centavo” en el aeropuerto de Texcoco.
De la renuncia del subgobernador de Banxico, Roberto del Cueto, dijo que representa una pérdida importante porque se trata del decano de la Junta de Gobierno, quien tenía más experiencia.
Rogozinski dijo retirarse tranquilo y satisfecho con su trabajo al frente de Nafin, porque durante la presente administración se superaron las metas de colocación cada año. Además, se retomó el apoyo a grandes proyectos de impacto económico y social para el país en sectores estratégicos, al pasar su cartera de crédito de primer piso de 9 mil 917 millones de pesos en 2012 a 56 mil 953 millones en que cerrará 2018.
El saldo del crédito de segundo piso aumentó de 53 mil 362 millones en 2012 a 155 mil 487 millones.