El negocio recientemente adquirido por el gobierno a través de Petróleos Mexicanos (Pemex), la refinería texana de Deer Park, cerró 2021 con pérdidas por 6 mil 749 millones de pesos, de acuerdo con sus estados condensados de resultados, obtenidos por EL UNIVERSAL.
Tales resultados, según la información oficial, se deben en parte a los efectos del Covid-19, que impactaron negativamente a la industria energética debido a restricciones de movilidad y el paro de diversas industrias.
“En la refinería de Deer Park se observó el impacto en la reducción de los márgenes de refinación por una menor demanda de combustibles, por lo que al inicio del ejercicio 2021, los socios de Deer Park decidieron apoyar financieramente al complejo, considerando los problemas de liquidez del negocio al cierre de 2020”, detallan.
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Entre 2019 y 2021, esta refinería suma pérdidas por 17 mil 739 millones de pesos en su operación como negocio.
La merma observada en 2019, por 2 mil 877 millones de pesos, se debió “al mantenimiento mayor al que fue sometida la refinería, lo que provocó una disminución en el procesamiento de petróleo crudo para la obtención de productos refinados”.
En 2020, las pérdidas por 8 mil 113 millones de pesos “fueron el resultado de la desaceleración económica y de la disminución en el consumo de productos refinados ocasionada por el Covid-19”, mientras que el año pasado el resultado negativo se debió a “reparaciones no esperadas en la unidad principal de destilación y coquizadora de la refinería, y a las fuertes nevadas en la zona de Texas”.
Esto significa que, desde 2019, Deer Park mantiene un nivel de procesamiento por debajo de 340 mil barriles diarios, considerada su capacidad instalada.
En 27 años de sociedad, según Pemex, este complejo procesó mil 685 millones de barriles de crudo tipo Maya, con un promedio de 170 mil barriles diarios, siendo el principal cliente del crudo mexicano en el mercado internacional.
Pemex tiene participación accionaria en el complejo desde el 31 de marzo de 1993, a través de PMI NASA, cuando adquirió 49.995% de las acciones.
El pasado 20 de enero, luego de que Pemex cerró la compra de 50.005% de la participación restante en la refinería, el presidente Andrés Manuel López Obrador garantizó a trabajadores de la planta que no habría despidos ni disminución de salarios.
“Estoy seguro de que van a seguir trabajando con el mismo entusiasmo y vamos a seguir produciendo y garantizando la rentabilidad, porque no debemos de tener pérdidas, debemos tener utilidades”, afirmó.
Impacto pandémico
En su informe sobre la situación financiera correspondiente al primer trimestre de 2022, Petróleos Mexicanos sostuvo en relación con el desempeño de la refinería texana que del 20 de enero al 31 de marzo de 2022 procesó 282 mil barriles diarios de crudo (58 mil barriles menos respecto a su capacidad instalada), y produjo 294 mil barriles diarios de productos petrolíferos, de los cuales 84.2% fueron destilados.
El documento subraya que los efectos del Covid-19 impactaron negativamente a la industria debido a las restricciones.
El informe detalla que a lo largo del ejercicio que recién terminó se presentaron efectos con impacto material sobre los resultados de la refinería, como los bajos márgenes de refinados como resultado de una menor demanda por la pandemia.
Además, se suspendieron operaciones derivadas de la tormenta invernal de febrero de 2021, pues resultó en un paro total de emergencia, restaurándose las actividades hacia la última semana de marzo, aunque fue necesario ejecutar actividades de reparación que finalizaron en noviembre de 2021.
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