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Si bien para el gobierno es prioritario restablecer el Sistema Nacional de Refinación, al menos en el Plan Nacional de Desarrollo (PND) 2019-2024, entregado el martes a la Cámara de Diputados, la construcción de la refinería de Dos Bocas no mereció un apartado como el que recibieron otras obras de infraestructura.
Para esta administración hay tres proyectos de infraestructura prioritarios en los próximos seis años: el Tren Maya, el Corredor Transístmico y el nuevo Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles en Santa Lucía.
En tanto, el complejo refinador que se prevé construir en Dos Bocas, Tabasco, sólo tiene una mención directa, en referencia a que “no habrá incrementos de impuestos en términos reales ni aumentos a los precios de los combustibles por encima de la inflación. Tanto estos como las tarifas eléctricas se reducirán hacia mediados del sexenio, cuando se completen las obras de la nueva refinería de Dos Bocas, rehabilitación de las ya existentes y la recuperación de la capacidad de generación de Comisión Federal de Electricidad”. Añade que, con ello, México podrá producir bienes con mayor valor agregado, mitigar la dependencia nacional en la importación de petrolíferos.
Además, se va a garantizar el abasto accesible a combustibles y energía de la población en general, tomando en cuenta que derivado de la falta de mantenimiento el Sistema Nacional de Refinación operó en 2018 a un promedio de 41% de su capacidad.
La producción nacional de combustibles está en mínimos históricos, provocando que 78% de la demanda nacional de gasolinas se cubriera en 2018 con importaciones, de acuerdo con la Secretaría de Energía.
En el capítulo de establecer una política energética soberana, sostenible, baja de emisiones y eficiente para garantizar la accesibilidad, calidad y seguridad energética, se menciona que garantizar el abasto nacional de energéticos y alimentos contribuye al desarrollo sostenido, pues asegura la alimentación de la población y la disponibilidad de insumos de producción de buena calidad y a precios competitivos.
Agrega que para satisfacer la demanda creciente de energía a precios accesibles, y así garantizar la soberanía y seguridad energética nacional, será necesario potenciar la producción nacional de energía de manera sostenible, promoviendo su generación con fuentes renovables.
En contraste, el documento del plan de desarrollo dedica más espacio a los proyectos regionales.
De acuerdo con el documento rector de este gobierno, el Tren Maya “es el más importante proyecto de infraestructura, desarrollo socioeconómico y turismo del sexenio”.
El segundo proyecto en importancia es el Programa para el Desarrollo del Istmo de Tehuantepec, cuyo objetivo es impulsar el crecimiento de la economía regional.
Y, respecto al nuevo Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, por edificarse en la base militar de Santa Lucía, el gobierno federal considera que se sumará a la infraestructura aeroportuaria de la que se dispone en el centro del país, para conformar una triada de terminales aéreas entre las que se encuentran además del actual Aeropuerto Internacional Benito Juárez, el Aeropuerto Internacional de Toluca.