A más de tres años del gobierno actual, y cuatro y medio de firmar el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) detectó que el país opera con una logística cara, ineficiente y bajos niveles de calidad.
En un diagnóstico de la Agencia Reguladora del Transporte Ferroviario (ARTF), con fecha del 16 de marzo pasado, y al cual tuvo acceso EL UNIVERSAL, el organismo aseguró que uno de los problemas de logística “es la falta de interconectividad entre el transporte terrestre, marítimo y ferroviario… lo cual es una barrera al comercio y la Inversión Extranjera Directa y, en consecuencia, al crecimiento económico”.
Reconoció que el país “no cuenta con suficiente infraestructura logística para afrontar las nuevas condiciones del T-MEC para los sectores prioritarios”. La ARTF citó que datos del Banco Interamericano de Desarrollo sitúan a México, “por la desarticulación del transporte, con incrementos en los costos de logística entre 14% y 35% del valor del producto final para todas las mercancías que se producen, consumimos y exportamos, en comparación con los estándares del resto de las economías de la OCDE , que son 8% en promedio”.
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El costo logístico es el valor por llevar una cierta mercancía desde el centro de producción hasta el consumidor final, explicó.
Las autoridades advirtieron sobre cuellos de botella a corto, mediano y largo plazo, pues el volumen de toneladas transportadas por los modos aéreo, carretero, ferroviario y marítimo creció 51.7% entre 1994 y 2020; el carretero con la mayor participación.
Prevén transportar 3 mil 72 millones de toneladas este año y llegar a 5 mil 319 millones para 2050 por cada modo de carga.
La consultora Daqua señaló que México arrastra problemas de logística que no ha podido resolver. Desde 2017, en su estudio Retos y tendencias del sector logístico, basado en una encuesta a 700 ejecutivos dedicados a la logística, detectó que entre los principales obstáculos, 31% corresponde a la gestión del gobierno; 19%, infraestructura; 18%, procesos; 17%, tecnología de la información, y 15%, capital humano.
En ese momento, los empresarios entrevistados hicieron hincapié en debilidades en materia de infraestructura y señalaron la necesidad de mejorar el sistema de carreteras, de más parques logísticos, puertos de mejor rendimiento y la creación de nodos.
Coincidieron en que, en el caso de la gestión del gobierno, es necesario resolver aspectos de seguridad en el transporte, cumplimiento de compromisos y combate incesante a la corrupción.
Desde entonces, diversas organizaciones privadas y públicas trabajan para impulsar un sector de distribución y transporte capaz de hacer frente a todas las operaciones de traslado de los pedidos, en especial, los relacionados con la última milla.
Héctor Tejada Shaar, presidente de la Concanaco-Servytur, ve posible el monitoreo de los vehículos en tiempo real con la modernización digital. Usar la tecnología “es una forma de elevar las capacidades de la logística y potenciar sus recursos”, dijo.
Tras más de cuatro años del diagnóstico de Daqua, los problemas de logística siguen vigentes, de acuerdo con la ARTF.
En materia carretera, dijo que “la red nacional con que se cuenta es de 407 mil 958 kilómetros, pero no cumple las condiciones de cobertura y operativas de la red federal y las redes alimentarias y rurales para la conectividad de manera eficiente con los diferentes modos de transporte”.
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Nuevo sistema
La ARTF recibió la instrucción de diseñar un nuevo S istema Nacional de Corredores de Transporte Intermodal, que permitiría “un gran potencial para el desarrollo del mercado interno y mundial”.
En próximos días tiene previsto licitar estudios de preinversión para la formulación de ese nuevo sistema mediante una inversión de 4.1 millones de pesos.
Los estudios deberán iniciar este mes y se prevé que los resultados estén sobre la mesa de las autoridades, incluyendo la Presidencia de la República, a más tardar en octubre próximo.
Entre los beneficios del proyecto está elevar la competitividad de la economía nacional, mediante la coordinación de los agentes que intervienen en la operación del traslado de mercancías; generar estrategias para integrar los diferentes modos de transporte; agrupar los sectores industriales y categorizarlos, para identificar estrategias urgentes, y elaborar diagramas de densidad de la red multimodal e intermodal y sus relaciones con las capacidades operativas.