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El fabricante de suspensiones y frenos Rassini prevé ventas superiores a mil millones de dólares este año, pues considera que el panorama para la industria automotriz es positivo a mediano y largo plazos.

Durante su presentación en el Foro Forbes 2018, Antonio Madero, presidente del consejo de administración de Rassini, destacó que hace 30 años, cuando adquirió la compañía, vendía 30 millones de dólares al año y para 2018 anticipa cerrar con más de mil millones de dólares.

“Rassini es una de las empresas más globales del sector automotriz. Tenemos operaciones en México, Brasil, Estados Unidos y una amplia base de clientes como Tesla, Masserati, Toyota, Audi, General Motors, Ford y Fiat Chrysler”, indicó.

Rassini es de los principales fabricantes de suspensiones y proveedores de frenos en Norteamérica.

Con respecto a la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), Madero comentó que la empresa está muy por encima del mínimo que exige la regla de origen para la fabricación de componentes.

Además, la nueva regla de origen que México negoció con Estados Unidos en el acuerdo de entendimiento del TLCAN es una oportunidad para que las armadoras le compren más componentes a Rassini, ya que cuentan con tecnología que les permite ser proveedores de nuevos vehículos.

La regla de origen para la fabricación de vehículos en Norteamérica pasó de 62.5% a 75% de contenido regional, donde 40% de los componentes tendrán que ser fabricados en zonas con un salario de 16 dólares la hora como mínimo, es decir, en Estados Unidos y Canadá.

Antonio Madero formó parte del equipo de negociación del primer TLCAN en 1990, cuando fue presidente del Consejo Mexicano de Negocios.

Por su parte, el director general de Rassini, Eugenio Madero, considera que el acuerdo de entendimiento en cuanto a la regla de origen es positivo para México, ya que se mantiene la misma cadena de suministro en la región.

“Hemos venido creciendo mucho en participación de mercado (en Canadá y Estados Unidos) y lo seguiremos haciendo con nuestros clientes según vayamos presentando las propuestas tecnológicas. A raíz de nuevas tecnologías en el mercado subimos a nuevas plataformas”, explicó .

Rassini ha crecido 10% en participación de mercado en Norteamérica en proveeduría de compuestos en los últimos cuatro o cinco años.

Actualmente, Rassini está invirtiendo en una empresa de tecnología en Israel para mejorar las características de sus productos.

Además, cuenta con la máquina impresora en 3D más moderna de América, la cual permite fabricar prototipos en dos horas en lugar de las seis semanas que tomaba anteriormente.

Rassini también ha firmado convenios de investigación con universidades en Columbia, Nueva York, Alabama, Canadá, Michigan y México para capacitar ingenieros.

En la compañía trabajan 300 ingenieros, los cuales desarrollan nuevas tecnologías como internet de las cosas, big data, digitalización e inteligencia artificial.

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