La Comisión Federal de Electricidad ( CFE ) anunció que la onda ártica que se presentó en Texas en febrero de este año y que impactó los precios del gas que la empresa importa de esta región le costó a la empresa -junto con otros combustibles- 68 mil 333 millones de pesos.
Al dar a conocer sus estados financieros correspondientes al primer trimestre del año, la empresa eléctrica estatal reconoció que tuvo un incremento en los costos energéticos que utiliza en sus centrales para generar electricidad por la emergencia climática que se observó en el estado texano a principio de año.
Esta situación provocó que los costos de operación de CFE se elevarán 68% en los primeros tres meses del año, alcanzando la cifra de 158 mil 412 millones de pesos, 63 mil 993 millones más que en el primer trimestre del 2020.
Asimismo, reportó una pérdida cambiaria por 13 mil 865 millones de pesos al cierre de marzo del año en curso, 119 mil 944 millones de pesos menos que la observada en el mismo periodo del año pasado por la apreciación del peso respecto al dólar en 12.4%.
Respecto de los ingresos generados por la empresa productiva del Estado, el reporte sostiene que al cierre del primer trimestre sumaron 152 mil 578 millones de pesos, que representan un aumento del 22% en comparación con el periodo enero-marzo del año anterior.
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Dicho incremento, explica, obedece a un aumento en los ingresos por venta de combustibles a terceros, como resultado de la contingencia antes mencionada.
La empresa reconoce que su deuda total se incrementó en 72 mil 803 millones de pesos, equivalente a 20% respecto a 2020, “debido a que la CFE acudió de forma oportuna a los mercados de capitales para refinanciar deuda contratada anteriormente con vencimiento en el segundo trimestre de 2021, periodo en el cual se verá compensado parcialmente en el saldo de la deuda total”.
Poco antes, presentó sus estados financieros anuales dictaminados al 31 de diciembre de 2020, en los cuales reconoció una pérdida neta por 85 mil 996 millones de pesos.
CFE había reportado a los inversionistas en su informe a la Bolsa de Valores presentado el 26 de febrero del 2021, una pérdida neta de 78 mil 919 millones de pesos.
La empresa comentó que este resultado se presentó por “los efectos económicos de la pandemia del virus SARS-CoV2 y la caída de los precios internacionales del petróleo durante 2020, una depreciación del 5.9% del peso respecto al dólar lo que generó una pérdida por fluctuación cambiaria de 33 mil 922 millones de pesos, afectando el resultado integral de financiamiento, al pasar de 27 mil 965 millones en 2019 a 92 mil 390 millones de pesos en 2020.
Asimismo, reconoció que sus ingresos acumulados al cierre del ejercicio de 2020 disminuyeron 10%, equivalentes a 57 mil 175 millones de pesos derivado de una menor demanda de energía por 12 mil 244 Giga watts/hora, “por una disminución en las ventas de energía eléctrica en el sector industrial debido a la contingencia sanitaria por SARS-CoV-2, a pesar del incremento en el consumo de electricidad en el sector doméstico”.
La deuda o pasivo total de la empresa se incrementó en 8.2%, “como resultado de la revaluación del pasivo por arrendamiento y de la deuda contratada en dólares, debido a la depreciación del peso frente al dólar por 5.9% del cierre de diciembre de 2019 respecto al mismo periodo de 2020”.
Adicionalmente, el pasivo por arrendamiento se incrementó en 40 mil 842 millones de pesos, equivalente a 7.2%, mientras que la deuda incrementó en 10 mil 121 millones de pesos, equivalente a 2.9% respecto al 2019, cifra incluso menor a la tasa de inflación registrada el año anterior.
CFE cerró el año pasado con una deuda total, según lo reportado al mercado de valores de México, del orden de 363 mil 548.6 millones de pesos.
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