Eliminar la subcontratación como se establece en el dictamen de la reforma laboral que impulsa el Ejecutivo conllevará importantes cambios fiscales y legales que las empresas deberán tomar en cuenta para adecuarse a la nueva reglamentación en un plazo de sólo tres meses, advirtieron especialistas.
Socios de SKATT, firma especializada en servicios fiscales, consideraron que uno de los puntos más delicados del proyecto será la transferencia de trabajadores que estaban subcontratados a la plantilla de la empresa que recibía sus servicios.
El abogado laboral y socio de La Vega y Martínez Rojas, Óscar de la Vega, explicó que sólo se permitirá la subcontratación en casos de servicios u obras especializadas, siempre y cuando no contrate personal que se dedique a la misma actividad de la compañía, y que el contratista esté en el padrón público de la Secretaría del Trabajo.
Añadió que bajo esta figura se abre la posibilidad del insoursing, es decir, cuando una compañía ofrece servicios a otra, pero que pertenece al mismo grupo empresarial, siempre y cuando no formen parte de la misma actividad económica.
Especialistas destacaron que bajo la nueva ley no puede haber empresas sin trabajadores, por lo que va a ser fácil para el SAT y la Secretaría del Trabajo identificar las que tienen una alta facturación con bajo costo laboral.
La Confederación Mundial del Empleo (WEC, por sus siglas en inglés), asociación empresarial global de agencias privadas de trabajo, hizo un llamado urgente al Congreso para que reconozca la subcontratación de personal temporal en la ley de una manera que se ajuste a la realidad mexicana y a las necesidades del mercado laboral.