El monto presupuestal que se dio a programas productivos al sector agropecuario se redujo en estos últimos años de manera que de representar 79%, ahora no figuran en la propuesta presupuestal del proyecto presupuestal para la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader).
De acuerdo con Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA), además de que el presupuesto proyectado 2025 disminuyó en 493 millones de pesos, con respecto al del 2024, una reducción nominal de 0.7%, rubros como la educación e investigación sufrieron recortes significativos con una disminución de 328 millones de pesos.
Para este año se pidieron 74 mil 109 millones de pesos y para el 2025 la solicitud es de 73 mil 616 millones de pesos; cifras menores a lo que se pidió en el sexenio pasado cuando en 2016 se pidieron 84 mil 827 millones de pesos, 74 mil 700 en el 2017 y 76 mil 476 en 2018.
Además de ello los programas prioritarios del gobierno federal ahora representan el 74% del total del presupuesto de la Sader, lo que incluye producción para el bienestar, precios de garantía, fertilizantes, adquisición de leche a productores nacionales, programa de abasto rural Diconsa, consumo de leche Liconsa, crédito ganadero a la palabra, entre otros.
Lo que contrasta con el proyecto que se presentó en el 2016, cuando los programas productivos representaron el 79% del total del presupuesto.
GCMA añadió que “el proyecto de presupuesto 2025 muestra retos significativos a la Sader que debe ser la entidad que promueva y fomente el aumento de la producción, productividad y rentabilidad sustentable”.
Añadió que ante la falta de programas que promuevan verdaderamente el incremento de la producción, en el sexenio pasado se aumentaron las importaciones de granos.
“Preocupa la mayor dependencia de las importaciones de granos y oleaginosas, en el sector hortofrutícola se observa menor dinamismo por la inseguridad y políticas de fomento, en el pecuario no se observan programas que fomenten aumento a la productividad, ni a la bioseguridad, mejora genética, capacitación ni en el agroindustrial se promueve mayor orden del mercado de caña-azúcar y del agave”, explicó.
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