El cierre de negocios no esenciales en la primera mitad de 2020 y en diciembre pasado a causa del Covid-19 afectó a los socios de la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD), que terminaron el año con caídas de 6.2% en ventas a tiendas iguales y de 3.8% a tiendas totales.
El presidente de la ANTAD, Vicente Yáñez, aseguró que el año anterior sólo las tiendas de autoservicio tuvieron alzas en ventas, mientras que en departamentales y especializadas hubo disminuciones.
En 2020 las mayores caídas se registraron en las ventas de ropa y calzado, de 27% a tiendas iguales (facturación comparable en unidades con más de un año de operación) y de 24.9% a tiendas totales, mientras que la comercialización de mercancías generales bajó 1.8% a mismas tiendas y 0.4% en tiendas totales.
En tanto, las ventas de abarrotes y perecederos, que representan 45% del total, vieron un crecimiento de 0.1% a mismas tiendas y de 3.7% a tiendas totales.
Por formato de establecimiento, a lo largo del año pasado las cadenas departamentales tuvieron contracciones en ventas de 15.1% en tiendas iguales y de 13.6% a tiendas totales; mientras que en comercios especializados cayeron 6% en mismas tiendas y 2% a tiendas totales.
Sin embargo, en el caso del autoservicio la facturación creció 5.4% a tiendas iguales y 7.7% en tiendas totales.
La ANTAD también informó que las ventas totales generales de 2020 se ubicaron en un billón 300 mil millones de pesos, que refleja las caídas de tiendas departamentales, cierres por pandemia, incertidumbre por políticas del gobierno, más competencia de informales y la inseguridad.
Pide reabrir 3 mil 675 tiendas
Debido a que las tiendas departamentales y especializadas no fueron consideradas esenciales ante la pandemia de Covid-19, registran pérdidas y la posibilidad de cerrar, lo que se traducirá en pérdida de empleos, dijo la ANTAD.
Ante ello, pidió al gobierno sumarse a la iniciativa #ReactivarSinArriesgar.
El presidente de la asociación, Vicente Yáñez, dijo que hay 83 mil 956 personas que se encuentran sin laborar y “sus empleos están en riesgo debido al cierre de 3 mil 675 tiendas”, las cuales tuvieron pérdidas superiores a 21 mil 105 millones de pesos durante 2020.