A causa de la alta inflación, los mexicanos han dejado de comprar kilos completos y empezaron a comprar por piezas, además de que ya no consumen frutas y verduras frescas, optando por producto maduro e incluso pasado de tiempo, dijo el presidente de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC), Cuauhtémoc Rivera.
“La gente abandonó la compra por kilo y ahora compra a granel. Compra una o dos cebollas, tres jitomates… están en una postura de ‘cuenta chiles’, no hay de otra. Están focalizando, restringiendo y racionalizando su consumo”, dijo a EL UNIVERSAL.
Explicó que eso se ha visto desde 2021, pero al subir todavía más los precios este año, “lo más dramático es que las personas comen menos. Por ejemplo, entre las frutas y verduras encarecidas, simplemente dejan de comer cebolla y papa”.
A causa de la carestía, actualmente se paga el doble por un producto en comparación con los precios de fines del año pasado.
De acuerdo con datos de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), por un kilo de papa se pagan 21 pesos más si se compara el precio de la cuarta semana de diciembre de 2021 con el de la tercera semana de agosto de 2022, ya que pasó de 25 a 46 pesos por kilo.
La naranja se duplicó en ese periodo, ya que, de costar 18 pesos, el kilo subió a 36 pesos.
En promedio, el kilo de cebolla blanca sin rabo se vendió a finales de diciembre de 2021 en 33 pesos, mientras que en la tercera semana de este mes llegó a 47 pesos, es decir, 14 pesos más.
En el caso del aceite Nutrioli, en botella de 946 mililitros, los datos de Profeco arrojan que en la tercera semana de agosto de 2022 se vendió en 51.70 pesos, lo que significó 5.30 pesos más que los 46.40 pesos de la cuarta semana de diciembre.
Un paquete de 18 piezas de huevo blanco de la marca Bachoco es 6.90 pesos más caro en el mismo periodo, al venderse la semana pasada en 50.20 pesos.
El pan de caja rebanado blanco de la marca Bimbo, en su presentación grande de 680 gramos, subió 2.40 pesos, para venderse este mes en 41.30 pesos por paquete, indican los datos de Profeco.
En el caso del kilo de pollo entero a granel con vísceras, su precio subió 4.20 pesos en el periodo de referencia, de manera que pasó de 45.90 a 50.10 pesos.
En tanto, el gas LP estacionario y el gas LP en cilindro tuvieron incrementos de 1.20 pesos en su precio por litro y de 2.10 pesos por kilo, respectivamente, en el mismo periodo.
El Inegi informó el miércoles que la inflación anual en México en la primera quincena de agosto llegó a 8.62% anual, con un incremento de los precios de los alimentos de 13.77%.