El petróleo mexicano perdió este lunes una tercera parte de su valor y finalizó en 24.43 dólares por barril, el precio más bajo desde febrero de 2016, debido al fracaso de un acuerdo de producción entre la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y por la liberación de volúmenes de extracción de Arabia Saudita y Rusia.
Esta tarde, Petróleos Mexicanos (Pemex) informó que la cotización de la mezcla mexicana de crudo de exportación se desplomó 31.7% o 11.3 dólares con respecto al viernes pasado, su peor caída en un día desde la Guerra del Golfo de 1991.
El petróleo mexicano cotiza hoy a la mitad que el precio promedio de 49 dólares por barril que el gobierno garantizó para el presupuesto de 2020, mediante la contratación de un programa de coberturas petroleras, cuyo costo fue de 20 mil millones de pesos.
Los Criterios Generales de Política Económica 2020 explican que si bien la baja en los petroprecios reduce los gastos por importar gasolinas y otros hidrocarburos para Pemex, el sector público padece pérdidas superiores debido a la caída en sus ingresos por exportaciones de petróleo.
Las cotizaciones internacionales del petróleo perdieron también casi una tercera parte de su valor este lunes.
La moneda y la bolsa de México se desplomaron este lunes golpeadas por la incertidumbre mundial en torno al avance del nuevo coronavirus y en medio de un derrumbe de los precios internacionales del petróleo, del que México es productor.
El peso mexicano se depreció 4.83% con respecto al cierre oficial del Banco de México (central) del viernes y quedó en 21.17 unidades por dólar, su nivel más bajo desde el 26 de enero de 2017, según datos de la institución.
El fuerte declive del peso llevó a que la Comisión de Cambios de México, conformada por funcionarios del Ministerio de Hacienda y el banco central, anunciara este lunes un aumento de 10 mil millones de dólares en el monto de un programa de coberturas cambiarias, liquidables en moneda nacional, que emplea para aportar liquidez al mercado durante episodios de alta volatilidad.
La bolsa, por su parte, se hundió 6.42%, su peor baja diaria desde octubre del 2008 -en pleno estallido de la última gran crisis financiera mundial-, dejando a su principal indicador, el Índice de Precios y Cotizaciones (IPC), en 38.730,56 puntos.