El regreso de la aversión al riesgo a escala global en los mercados financieros ante la posibilidad de una recesión y la mayor inflación volvieron a fortalecer al dólar frente a la mayoría de las divisas, incluyendo al superpeso.
La divisa mexicana llegó el miércoles a 17.59 pesos por dólar al mayoreo, con lo que liga cinco sesiones de pérdidas, acumulando una depreciación de 5.2% o 86 centavos en dicho periodo, de acuerdo con datos de Bloomberg.
La depreciación del peso inició el pasado jueves, cuando la Comisión de Cambios anunció un recorte en el valor de las coberturas ofrecidas por el Banco de México.
La debilidad de la moneda nacional continuó esta semana, “primero por los resultados de algunos indicadores en Europa, que vuelven a traer en escena la posibilidad de una estanflación (estancamiento económico con inflación) en la región, así como datos en China que dieron también señales más profundas de una desaceleración en el país asiático”, explicó James Salazar, subdirector de análisis económico de CI Banco.
Luego vino el anuncio de Rusia y Arabia Saudita de extender hasta finales del presente año sus recortes de suministro de petróleo, lo que provocó un aumento importante del precio internacional del crudo a niveles no observados desde noviembre de 2022.
Lo anterior generó que regresara el temor de que el alza del petróleo pueda presionar la inflación global, impactando en las decisiones de los principales bancos centrales, endureciendo su política monetaria, ya sea subiendo las tasas de interés o al menos dejarlas en niveles altos, pero por un tiempo más prolongado, destacó Salazar.
Estas especulaciones sobre los siguientes pasos que daría en específico la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) se ha consolidado con algunas declaraciones de sus integrantes regionales, quienes ven la necesidad de seguir subiendo la tasa de interés, agregó.
Esta serie de elementos mina la confianza de los inversionistas y es el pretexto que están tomando para deshacerse de activos riesgosos, entre ellos las monedas.
“No es un fenómeno exclusivo del peso. La realidad es que está afectando a casi todas las monedas; el dólar se está apreciando y, así como el peso suele ser de las divisas que más ganan, ahora es de las que más pierden”, comentó Salazar.
El dólar al menudeo cerró el miércoles arriba de 18 pesos en las ventanillas de bancos por primera vez desde el 1 de junio, de acuerdo con datos de CitiBanamex.
En opinión de Salazar, es posible que sigan las presiones a muy corto plazo, y quizá hacia finales de la semana la paridad podría pegarse a 17.80 unidades, pero a partir de la siguiente semana podrían disminuir, sobre todo a partir de que se dé a conocer el dato de la inflación de agosto en México.
Adicionalmente, el 20 de septiembre, en la reunión de la Reserva Federal, hay posibilidades de que la calma retorne a los mercados y que a finales de mes la paridad intente acercarse a 17.00 o 17.10 pesos, estimó.