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cartera@eluniversal.com.mx
La calificadora Standard and Poor’s informó que se mantienen los riesgos por posibles litigios de tenedores de bonos por la cancelación de la obra del Nuevo Aeropuerto Internacional de México en Texcoco.
“Incluso, si los tenedores de títulos recurren al flujo de efectivo del aeropuerto de México existente, persisten incertidumbres sobre los riesgos de litigios de los acreedores que no dieron su consentimiento y las posibles consecuencias no deseadas de la conclusión del proyecto”, destacó la firma.
En el análisis Lo que importa a los inversionistas en infraestructura en 2019: Brexit, populismo y riesgos de país, la agencia detalló que se tuvo un resultado positivo en la reciente oferta de compra en efectivo y la solicitud de consentimiento para los bonos del NAIM a fines de 2018 por parte del gobierno y que dicho esquema debería llevar a una reducción de la deuda y menor incertidumbre a tenedores de bonos una vez que se hayan ejecutado de manera plena y adecuada.
Para la agencia, uno de los eventos de infraestructura de más alto perfil en los mercados emergentes es la agitación en torno al Nuevo Aeropuerto Internacional de México, luego de su cancelación por parte del gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Así, el análisis de Standard and Poor’s resalta que además de las preocupaciones sobre la desaceleración de la economía mundial y lo que se considera la última etapa del ciclo crediticio, los inversionistas en infraestructura están preocupados por el aumento de los riesgos políticos, en parte como resultado del creciente populismo y el nacionalismo, y en qué medida pueden afectar los acuerdos contractuales y regulatorios, la estabilidad y, en definitiva, el riesgo país y la calidad crediticia soberana.
“Los mercados emergentes vieron muchas elecciones clave en 2018, pero su efecto en las políticas aún está por verse, como en México y Brasil”, resaltó la calificadora.
En el caso de Estados Unidos, Standard and Poor’s enfatizó que existe interés del presidente Donald Trump y de los partidos Republicano y Demócrata en dar prioridad a la infraestructura. Sin embargo, no hay consenso sobre cómo se financiará la infraestructura, y los desacuerdos sobre la inmigración podrían poner fin a un plan unificado”, añadió.
S&P resaltó que las perspectivas para la economía mundial en 2019 son claras, porque el crecimiento global se desacelerará en conjunto y en la mayoría de los países importantes.