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El margen de maniobra del gasto del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) se ha acotado año con año por el creciente presupuesto que se debe destinar a un rubro inevitable: las pensiones y jubilaciones.
Datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) muestran que el gasto total que ejerció la institución de salud en el primer trimestre ascendió a 147 mil 569 millones de pesos, de los cuales 98 mil 661 millones fueron para atender las pensiones y jubilaciones.
Significa que del total de recursos que el IMSS desembolsó en el periodo enero-marzo de este año, 67% (dos de cada tres pesos) de ellos fueron para atender la prestación económica destinada para proteger a los trabajadores y de las personas retiradas.
Se trata de la proporción más alta en los registros de la dependencia para un periodo similar y es más del doble de lo que llegó a representar en 1995 —año en que se comenzaron a contabilizar estos datos—, cuando entonces sólo tenían un tamaño de 31% del gasto total.
Hoy, con el monto de las pensiones y jubilaciones erogadas por el IMSS al primer trimestre del año se puede financiar el presupuesto anual de la Secretaría de la Defensa Nacional, a la cual se le aprobaron ejercer 93 mil 670 millones de pesos.
Incluso, el desembolso que se hizo para las pensiones y jubilaciones en los primeros tres meses del año resultaron de más del doble de lo que el IMSS tiene que gastar para el rubro de servicios personales, es decir, para pagar sueldos y salarios de todo el personal que labora en la institución.
De acuerdo con el Presupuesto de Egresos de la Federación, el IMSS cuenta con una plantilla de 436 mil 403 personas este año. Entre enero y marzo destinaron 41 mil 486 millones de pesos en servicios personales.
Supera a los ingresos.
Ni siquiera los ingresos que genera el IMSS alcanzan a cubrir el monto que se requirió para pagar las pensiones y jubilaciones en el primer trimestre del año.
Los datos de Hacienda muestran que el instituto captó 89 mil 634 millones de pesos en el primer cuarto del año, la gran mayoría de ellos por las cuotas a la seguridad social.
Sin embargo, la cantidad es 9 mil 27 millones de pesos menor que los 98 mil 661 millones que fueron para pagar pensiones y jubilaciones.
Aun cuando los ingresos del IMSS no fueron suficientes para compensar los gastos, el balance financiero de la institución se encuentra en cifras positivas, con un saldo superavitario de 62 mil 342 millones de pesos en el primer trimestre.
El componente que le ayuda a cubrir el boquete que hay entre el ingreso y el gasto son los subsidios y transferencias que registra la dependencia, que en el periodo en cuestión sumó 120 mil 277 millones de pesos.
Debido al estrecho margen presupuestario que le queda a la dependencia de salud hay pocos recursos que pueden canalizarse en otros rubros que pueden potencializarla, como la inversión.
Desde que hay registros disponibles, el gasto de inversión en el IMSS nunca ha sido mayor al pago de pensiones y jubilaciones, y la distancia entre ambas cifras es considerable.
Como ejemplo, la inversión total en el IMSS fue de 9 mil 674 millones de pesos el año pasado, una cifra 41 veces menor si se compara con los 394 mil 460 millones que se necesitaron para cubrir las pensiones y jubilaciones.
Sin afectar prestaciones.
Pese a las medidas de austeridad al inicio de la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, no se reflejan en algún recorte en las prestaciones de los trabajadores del IMSS.
En el primer trimestre de este año se le entregaron 32 mil 86 millones de pesos a la institución para otorgar la serie de beneficios que obtiene su plantilla de trabajo. La cifra es de un millón 649 mil 301 pesos más elevada que la erogada en el mismo lapso del año pasado.
La dependencia es históricamente la que más recursos otorga en prestaciones en el sector público.
De acuerdo con datos de la SHCP, los servidores públicos de todas las dependencias de la administración federal recibieron 85 mil 937 millones de pesos entre enero y marzo de este año por apoyos, primas, aportaciones, premios, becas y beneficios que se les entregan. Del total, 37% correspondieron a empleados del IMSS.