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En México la adopción de la Inteligencia Artificial Generativa (IAGen) podría aumentar la productividad de hasta 14% de los empleos, según estimaciones del Banco Mundial (BM) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Sobre todo se verían más beneficiados los que no corren riesgo de desaparecer como los asalariados, trabajadores independientes como peluqueros, vendedores, arquitectos, agentes inmobiliarios y trabajadores de la salud.
Es decir en los empleos en los que no se depende de la tecnología digital.
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Mientras que el 5% de los puestos de trabajo se estarían enfrentando a la posibilidad de una automatización total, por ejemplo en la banca, en la administración pública, finanzas y educación superior.
De acuerdo con el estudio elaborado por investigadores de ambos organismos, en el 18% no se tiene la certeza si dicha exposición promovería la automatización o el acrecentamiento.
Pero se reconoce que el resultado final en nuestro país y en general para los que integran América Latina y el Caribe, dependerá de la evolución y los usos de la nueva tecnología en el futuro.
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Sector formal, el más expuesto a la automatización
La exposición de la IAGen en México y su impacto en la productividad de algunos empleos, está dentro del promedio de la región.
Tiene el mismo porcentaje que Costa Rica, Colombia y Suriname, en tanto que República Dominicana destaca con el más alto con el 15%.
En el trabajo de investigación conjunta del Banco Mundial y la OIT, se pone de manifiesto que el trabajo que realizan las mujeres de zonas urbanas, jóvenes, no pobres, con educación superior y del mercado laboral formal, serían las más expuestas a la automatización a través de la IAGen.
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Lo anterior significa que la posible pérdida de empleos bien remunerados, formales y calificados en industrias donde predominan las mujeres.
Se advierte que debido a la automatización provocada por la inteligencia artificial generativa, tendría impactos negativos en las economías de la región, ya de por sí muy informales y desiguales.
De ahí que el BM y la OIT instaron a los gobiernos a implementar políticas para proteger los puestos de trabajo, mejorar la productividad y maximizar el potencial transformador de la IAGen con el propósito de promover un crecimiento más inclusivo y un desarrollo sostenible.
sg/mcc
