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Al sistema aéreo nacional le costará más recuperar la categoría 1 en seguridad que perdió en mayo del año pasado, tras el hackeo a los sistemas de cómputo de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), que derivó en la suspensión hasta el 31 de diciembre de trámites a cargo de la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC).
Así lo señaló Juan Carlos Machorro, especialista en el sector aeronáutico y socio de la firma Santamarina y Steta.
“Será difícil que la autoridad mexicana avance conforme a lo anunciado por la comitiva del sector en su reciente visita a Washington, para acelerar la recuperación de la categoría 1”, alertó.
Para recuperar la categoría, explicó que hacen falta partidas presupuestales a fin de invertir en recursos humanos calificados y tecnología que permitan resolver, de fondo, los problemas pendientes que derivan en la mala calificación de la gestión gubernamental en materia aérea.
“Como nunca, hace falta pensar en términos de largo plazo y gestionar una política aeronáutica integral que aglutine las voces y las necesidades de todos los participantes en esta industria, la cual aporta oportunidades de crecimiento a la economía en general”, indicó.
Añadió que se identificaron líneas de acción concretas para recuperar la categoría en la reunión en Washington, a finales de octubre pasado, la primera línea de funcionarios de la SICT, el embajador en Washington y el encargado de despacho de la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA, por sus siglas en inglés), Billy Nolen.
Sin embargo, cuando parecía haber algo de luz, aparece la suspensión de trámites en la AFAC, “que poco abonará a estos esfuerzos”, opinó Machorro.
Por lo anterior, dijo que la industria aeronáutica debe estar atenta al plan correctivo del titular de la AFAC, Miguel Enrique Vallín Osuna, en línea con lo que se discutió en Washington.
Dicho plan correctivo tendría que estar listo en diciembre. Con esto, se daría pie a una visita adicional para revisar el plan y programar la auditoría final.
El gobierno mexicano, entonces, estimaría la posibilidad de recuperar la categoría a finales del primer trimestre de 2023.
“Habrá que ver si los cambios y medidas que se tomen sean de fondo para evitar que la situación se repita”, indicó Machorro.
La SICT aseguró que el software malicioso del hackeo no dañó sus sistemas ni se vieron vulnerados datos de ciudadanos.
Esto luego de que la SICT implementó acciones de contención, con lo que detectó el problema el pasado 24 de octubre.
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