El proyecto de Paquete Presupuestal para 2024 puede generar presiones al gasto para el próximo año y el primer año de la nueva administración, coincidieron analistas.
Durante la conferencia "Perspectivas económicas para 2024", que organizó la Cámara de Comercio e Industria Franco Mexicana (CCI Francia), la directora general de México ¿Cómo vamos?, Sofía Ramírez, dijo que el endeudamiento que plantea el Ejecutivo para 2024 significa un endeudamiento, que deberá pagarse por la administración entrante.
Explicó que el gasto público está muy comprometido, porque un tercio de éste se destina a pensiones, otro tanto es para el pago de la deuda, la cual no será más barata en el corto plazo, por lo que “muy probablemente terminaremos pagando más por servicio de deuda”.
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Además de que al quitarle recursos a diversos rubros como los 122 mil millones de pesos que se le restaron al sector salud, se impactará a la población y no se sabe cuál será “la cuenta” que tendremos al dejar a 30 millones de personas sin servicios de salud, porque apenas se pondrá en marcha IMSS Bienestar, siendo “pésima idea cambiar dos veces en un sexenio el instituto de salud”.
Al respecto, el economista en jefe de BBVA Bancomer México, Carlos Serrano, explicó que, “aunque la deuda pública como porcentaje del PIB está en niveles muy por debajo del promedio de países emergentes, en el mediano plazo y si la administración que viene no hace una reforma fiscal, la situación fiscal se puede empezar a deteriorar, sobre todo porque el pago de pensiones crece”.
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Añadió que el reto para el primer año de la próxima administración será reducir el déficit fiscal, así como aumentar la recaudación, de no hacerse “habrá problemas para enfrentar la sostenibilidad fiscal”.
Añadió que el gobierno federal actual considera una partida presupuestal importante para proyectos insignia y para los programas sociales, sobre todo electorales los cuales será “muy difícil quitarlos”.
