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noe.cruz@eluniversal.com.mx
La contribución de Petróleos Mexicanos (Pemex) a las finanzas públicas del país a través del pago de impuestos y derechos se ha reducido en 2019 a causa una estrategia para dotar de más crudo a las refinerías, como consecuencia de reducir sus volúmenes de exportación.
Derivado de la caída en ingresos, el pago de esas contribuciones se redujo de 80 mil 589 millones de pesos reportados en marzo, a 66 mil 150 millones en agosto, es decir, 18% menos.
Ese movimiento se debe a que Pemex ha reducido sus exportaciones de crudo para destinar más producción nacional a sus refinerías en los últimos ocho meses.
A diferencia de lo que hicieron administraciones pasadas para compensar la caída de precios, colocando mayor volumen de crudo en los mercados internacionales, la petrolera redujo en 73.5 mil barriles diarios su plataforma de exportación en los primeros ocho meses del año, en comparación con el mismo periodo de 2018, y por ello la caída de sus ingresos totales.
Con una mayor disponibilidad de petróleo crudo, el Sistema Nacional de Refinación, conformado por las refinerías de Madero, Tula, Salamanca, Cadereyta, Salina Cruz y Minatitlán, elevó los niveles de procesamiento de crudo y consecuentemente su capacidad instalada, lo que se vio reflejado en mayor disponibilidad de productos como gasolinas, diesel y turbosina producida en el país.
En consecuencia, la producción de gasolinas repuntó en el mismo lapso: la disponibilidad de Magna pasó de 152.8 mil barriles diarios en enero a 220.3 mil barriles, considerando que es el tipo de combustible de mayor consumo en México.
La producción de turbosina también se vio favorecida por la mayor disponibilidad de crudo para procesar, pues tuvo un repunte de 22.5 mil barriles diarios en enero a 38.4 mil barriles en agosto.
La medida tuvo un efecto en el nivel de ingresos de la petrolera y su contribución al fisco, tomando en cuenta la reducción de la plataforma de exportación y la caída de los precios del petróleo.
Pemex reportó en el periodo abril-agosto una reducción de sus ingresos totales de mil 322.6 millones de dólares, explicada en parte por una pérdida de valor de la mezcla mexicana del petróleo de exportación de 11.49 dólares por cada barril vendido en el exterior.
La reducción en el volumen de crudo exportado se ha concentrado en los embarques a Europa.
Durante los primeros ocho meses del año, los volúmenes de aceite mexicano al Viejo Continente se redujeron de 223.7 mil barriles diarios en enero a 161.2 mil barriles en agosto, lo que representó una caída de 28%, equivalente a dejar de enviar, aproximadamente, 67 mil barriles por día.