Acapulco se perderá la mejor temporada turística del año, así como eventos y actividades que pasarán factura a la población, dijeron expertos a EL UNIVERSAL.
La Secretaría de Turismo (Sectur) tiene registro de que los hoteles acapulqueños reportaron una ocupación de 51% entre enero y agosto de este año, cifra que se encontró a punto de igualar la tasa alcanzada en el mismo periodo de 2019, antes de la pandemia.
Sin embargo, la devastación del huracán condena al rezago turístico a Acapulco, pues ahora la recuperación tomará más tiempo.
Leer también: Huracán "Otis": ¿Qué es y para qué sirve el “Plan Billetes” que se activó tras devastación en Acapulco?
“Es difícil estimar en cuánto tiempo se puede recuperar la ocupación hotelera, pero lo que es un hecho es que se pierde la temporada. Estamos a cuatro semanas de iniciar la temporada de invierno, que es la más importante del país y estamos a ocho semanas del pico donde la ocupación y la tarifa es la más alta”, expuso Braulio Arsuaga, presidente del Consejo Nacional Empresarial Turístico (CNET).
También se perderán eventos como el Tianguis Turístico, el Abierto de Tenis y conciertos como el de Luis Miguel, lo que va a significar una pérdida económica para la llamada industria sin chimeneas, comentó a este diario.
Antes del meteoro, el turismo en el puerto estaba siendo afectado por la falta de promoción y los altos niveles de inseguridad.
La Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana del Inegi señaló que 74.9% de las personas adultas consideraba que era inseguro vivir en Acapulco en septiembre pasado, por arriba del promedio nacional de 61.4%.
Para Humberto Molina, consultor en economía turística de Grupo Empresarial Estrategia (Gemes), lo primero que se debe hacer es atender la emergencia actual y después hay que cuantificar los daños y tomar las medidas para poder poner otra vez al puerto en condiciones de recibir visitas.
“Hasta este momento no hay forma de saber todavía la magnitud de los daños, que son enormes, y de cuánto tiempo puede llevar la recuperación. Seguramente algunos hoteles y restaurantes podrán abrir antes que otros, todo va a depender de los apoyos que reciba el sector”, agregó Molina.
Con 5.8 millones de mexicanos que llegaron a sus hoteles, Acapulco fue el destino que más turistas nacionales recibió en alojamiento tradicional entre enero y agosto de este año, por encima de Ciudad de México, Guadalajara y Cancún, de acuerdo con cifras de la Sectur.
Leer también: Huracán “Otis”: Abasto de gasolina y diésel en Acapulco está garantizado, afirma Pemex
Imagen en riesgo
“Los seguros de hotelería se activarán pronto, pero en el caso de muchos edificios vacacionales o segundas casas esto no será tan rápido y eso es un problema grave, porque se va a deteriorar muy fuerte la imagen del destino si esto toma mucho tiempo para poder recuperarse y poder tener estos edificios, estos hoteles, ya abiertos y funcionando”, dijo Braulio Arsuaga.
“Vemos que todos los hoteles grandes o pequeños están afectados, no hay uno que se haya salvado, pero es especialmente preocupante lo que está pasando en el Acapulco viejo o en la bahía, donde hay hoteles muy antiguos y puede ser que no tengan seguro o no necesariamente sean manejados en cadena, sino más de forma familiar y que esto puede comprometer mucho más a este tipo de hoteles”, agregó el experto.
“Nosotros como gremio estamos esperando una coordinación de apoyo a nivel federal y estatal, además de que se activen lo antes posible los recursos que eran parte del Fondo de Desastres Naturales (Fonden) para la recuperación”, demandó el también líder de Grupo Presidente.
Para Humberto Molina, se requiere un gran programa de apoyo por parte del sector público para recuperar lo antes posible la infraestructura y tener a Acapulco otra vez abierto y con capacidad de recibir visitas, porque el turismo es la actividad fundamental de Acapulco y tiene una gran derrama económica en todo el estado.
Antes de la pandemia, el gobierno de Guerrero dio a conocer que el turismo aportaba 77% del Producto Interno Bruto del estado.