Los hoteles de las principales plazas turísticas del país ligaron cuatro semanas arriba de 50%. Es la primera vez que sucede desde mediados de marzo del año pasado, cuando se declaró la pandemia por Covid-19.

La ocupación para la semana 46, que comprende del 15 al 21 de noviembre de 2021, presentó un promedio de 54.3% en 12 destinos, tras registrar un nivel de 34.4% en el mismo periodo de 2020, dio a conocer ayer Miguel Torruco, titular de la Secretaría de Turismo (Sectur).

En la semana 45, la ocupación alcanzó una tasa de 56.2%; en la previa, de 56.9% y antes, de 52.2%, de modo que el alojamiento sumó cuatro semanas arriba del umbral de 50%.

En un comunicado, Torruco informó que Los Cabos, Baja California Sur, obtuvo el mayor nivel de ocupación hotelera del 15 al 21 de noviembre, con un nivel de 70.7% y significó un incremento con respecto a la semana inmediata anterior, cuando reportó una tasa de 70.1%.

En segundo lugar apareció Cancún, Quintana Roo, con 70.5% y Puerto Vallarta, Jalisco, con 69.2% de ocupación.

Centros de playa siguen mostrando el mejor desempeño, mientras las ciudades y pueblos continúan por debajo de 50%.

Con la segunda mayor oferta hotelera del país, la Ciudad de México anotó una ocupación de 48%; Puebla, de 38.3%; Querétaro, 36.5%; San Cristóbal de las Casas, 34.2% y San Miguel de Allende, 30.1%.

“Que no quepa la menor duda, nuestra actividad turística continúa fortaleciéndose y retomará los niveles de 2019”, externó ayer Miguel Torruco a través de su cuenta de Twitter.

La dependencia a su cargo anticipa que la ocupación hotelera nacional va a promediar 46% durante este año, tras desplomarse a un mínimo histórico de 26.3% en 2020, debido a las medidas que aplicaron las autoridades para intentar contener la pandemia.

Los establecimientos productores de bienes y servicios turísticos, como hoteles, aerolíneas y agencias de viaje, dieron trabajo de manera directa a 4.1 millones de personas entre julio y septiembre de este año, cuando se dieron las vacaciones de verano, según la Sectur.

Esta cifra significa 365 mil puestos menos que en los primeros tres meses del año pasado, cuando recién se decretaba la emergencia sanitaria.

Entre julio y septiembre, Quintana Roo y Baja California Sur fueron los dos estados donde más se redujo la pobreza laboral, de acuerdo con información del Coneval.

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