Hay una gran desinformación en la compra-venta de algunos billetes y monedas que se ofrecen a precios irreales en internet, y que muchas veces resultan ser estafas, advirtió el presidente de la Sociedad Numismática de México (Sonumex), Siddharta Sánchez.
En entrevista con EL UNIVERSAL, dijo que es importante seguir algunas recomendaciones para no caer en trampas, como allegarse de la mayor información posible, acercarse a los grupos de coleccionistas y consultar la literatura numismática para estar actualizado.
De las piezas que circulan actualmente, reconoció que hay desinformación sobre el precio de colección de las monedas de 20 pesos y de algunos billetes, específicamente los nuevos de 100 pesos de Sor Juana y el de 50 pesos con el ajolote.
“Para estas monedas y ese par de billetes, hemos encontrado sitios virtuales de compra-venta con precios que no corresponden a la realidad”, destacó.
En sitios como Mercado Libre y Ebay es posible encontrar una moneda conmemorativa de 20 pesos ofreciéndose hasta en 239 mil pesos, y 16 billetes de 50 pesos con el diseño del ajolote por 389 mil pesos.
Sánchez consideró que es muy importante alertar a la población de que estos precios nada tienen que ver con el verdadero valor de mercado de las piezas.
Ejemplificó con la moneda conmemorativa de Veracruz que se puso en circulación en 2014, que sigue teniendo un valor facial de 20 pesos. Si excede ese valor, entonces puede tratarse de una estafa, aseguró.
Todas esas monedas de 20 y ese par de billetes se siguen produciendo por millones, lo que genera que haya muchas piezas, las suficientes para satisfacer las necesidades del público coleccionista.
Por lo tanto, su verdadero valor difícilmente supera el doble del valor facial, y esto cuando su estado de conservación es óptimo, o bien casi se encuentra como cuando entró en circulación. Es decir, cuando tienen todo su brillo y ningún golpe, en el caso de las monedas, o sin ningún desgaste o dobleces para los billetes, puntualizó Sánchez.
“Todos los precios que excedan a esas cantidades, es decir el doble de su valor facial, seguramente se puede tratar de métodos para estafar o para aprovecharse del público incauto”, advirtió.
La Sonumex es un organismo sin fines de lucro creado hace 71 años, con la intención de investigar y difundir la numismática.
Es una de las más longevas e importantes a escala mundial, y tiene como fin provocar el coleccionismo y la difusión con encuentros numismáticos para el intercambio, así como subastas.
En sus más de siete décadas ha tenido dos mujeres presidentas y el actual es un administrador y sicólogo que desde su niñez empezó a tener interés por la numismática.
Cuando alguien tiene una pieza de las nuevas que busca vender, o se trata de un coleccionista principiante que la quiere adquirir, lo primero que hay que hacer es informarse bien, hacer una búsqueda sofisticada y profunda con base en los precios más altos, y no irse con la primera opción hallada en internet.
También identificar cuáles son los precios más bajos y entender que si están a la venta en esos montos, seguramente es porque tampoco se han vendido.
“Cualquier persona en una economía libre como la mexicana, puede colocar cualquier producto, ya sea una moneda o billete, y ponerle un valor de venta que desee”, dijo, “pero no porque en una plataforma se vea tal precio, significa que eso vale”.
Sánchez afirmó que, afortunadamente, no se han dado casos de víctimas de estos precios “irreales”.
Otra recomendación es acercarse a los grupos de coleccionistas locales, regionales o nacionales, lo que es fácil por medio de las redes sociales, en donde hay personas que llevan más tiempo en el coleccionismo y comparten su experiencia.
También es importante leer literatura numismática o tener contacto con agrupaciones formalmente constituidas para mantenerse actualizado, detalló.
Sobre las monedas o billetes que ya salieron de circulación, que surgieron en los años 70 y 80, pero sobre todo en los 90, los llamados “nuevos pesos”, dijo se está empezando a ver también el fenómeno de precios “irreales” y muy por encima del valor en el mercado coleccionista.
Reconoce que, si bien se deben aplicar los mismos consejos, ese comercio es un más complicado, porque es más difícil que la población tenga ese tipo de piezas.
“Si a alguien no le tocó esa época, puede asumir o pensar que es una pieza rara, escasa y, por lo tanto, muy cara”, afirmó.
Lo que procede, dijo, es hacer una investigación en internet como en las agrupaciones numismáticas, para ver los precios reales. De esta manera se puede evitar caer en algún tipo de timo o desilusión, aseguró.
Sánchez mencionó que en el coleccionismo sigue prevaleciendo la ley de la oferta y demanda. Así, existe un grupo de coleccionistas y una cantidad de piezas disponibles.
“Entre más piezas disponibles haya, el precio tiende a bajar, y entre menos piezas haya, el precio empieza a subir, porque la demanda es alta”, expuso.
Tradicionalmente el precio de una moneda o billete lo determinan tres indicadores, siendo el primero los catálogos de referencia que se elaboran con base a los históricos de cuánto se ha pagado por cada una.
El segundo son las subastas y compra-venta al día, es decir la evolución en el transcurso de semanas o meses recientes.
Por último, las condiciones propias que tiene cada pieza, pues aunque sea de una misma denominación y año, tiene diferente valor, según su estado de conservación.
“No vale lo mismo una moneda completamente nueva o, como decimos, sin circular, que una que fue maltratada y es del mismo año y denominación, pero desgastada y limpiada”, dijo.
Actualmente hay diversas piezas de 20 pesos que circulan o están guardadas en el cajón de las personas. Una de ellas es la conmemorativa a la llegada del Año 2000 y el Inicio del Tercer Milenio, en la que aparece un busto de tres cuartos de perfil a la derecha del Nobel Octavio Paz.
También existe la que se acuñó con motivo de la Representación prehispánica de Xiuhtecuhtli ‘Señor del fuego, Señor del año’.
Se pueden encontrar además una conmemorativa del Vigésimo Aniversario de la entrega del Premio Nobel a Octavio Paz y una del Centenario del Ejército Mexicano.
También hay una pieza por el 150 Aniversario del Natalicio y el 100 Aniversario Luctuoso de Belisario Domínguez Palencia. Una moneda por el Centenario de la Gesta Heroica del Puerto de Veracruz, y otra por el Centenario de la Toma de Zacatecas.
Hay una más por el Centenario de la Fuerza Aérea Mexicana, así como otra por el Bicentenario Luctuoso del Generalísimo José María Morelos y Pavón.
También es posible encontrar la del Centenario de la Promulgación de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos del 5 de febrero de 1917.
Otra pieza es la Conmemorativa del Quincuagésimo Aniversario de la aplicación del Plan DN-III-E, y una por el 50 aniversario de la aplicación del Plan Marina.
De igual manera se acuñaron otras piezas que pertenecen a la familia C1. Son las nuevas monedas de 20 pesos en forma dodecagonal o de 12 lados, de reciente lanzamiento y todas son válidas para realizar transacciones.
Para la moneda conmemorativa a los 700 años de la fundación lunar de la ciudad de México-Tenochtitlan se acuñaron 10 mil 500 piezas, misma cantidad que para la que celebra los 500 años de la memoria histórica de México-Tenochtitlan.
En tanto, para la del Bicentenario de la Independencia Nacional se produjeron 12 mil piezas y después 37 mil más.
Alrededor de mil piezas se fabricaron para la conmemoración de los 100 años de la llegada de los menonitas a México, igual cantidad para la del Bicentenario de la Marina Armada de México en el último trimestre de 2022.