Honda Motor Co. y Nissan Motor Co. están considerando una probable fusión que, según expertos, posicionaría a la compañía combinada como la de mayor competitividad a nivel mundial haciéndole frente a Toyota Motor Corp. en Japón, el principal fabricante de automóviles internacionalmente.
De acuerdo con la agencia informativa Bloomberg, el vicepresidente ejecutivo de Honda, Shinji Aoyama, informó que la empresa se encuentra analizando múltiples opciones, entre las que sobresale la fusión de capitales. Tras difundirse la noticia, de acuerdo a la agencia, las acciones de Nissan subieron hasta 24%, mientras que las de Honda cayeron 3.4%.
Ambas compañías han mantenido conversaciones preliminares sobre la posible fusión.
Además, se prevé la definición de un holding empresarial entre las dos automotrices, lo que de consolidarse podría extenderse para incluir también a Mitsubishi Motors Corp., que ya tiene vínculos previos con Nissan.
La fusión comenzó a considerarse desde que a principios de año las dos empresas trabajaron como aliadas en la elaboración de baterías y software para automóviles eléctricos. Durante ese trabajo colaborativo, el director ejecutivo de Honda, Toshihiro Mibe, planteó la posibilidad de una alianza.
En caso de efectuarse de manera exitosa, la unión podría hacerle frente a Toyota. En el primer semestre de 2024, Honda, Nissan y Mitsubishi vendieron en conjunto alrededor de cuatro millones de vehículos en todo el mundo; cantidad sumamente inferior comparada con los 5.2 millones que vendió Toyota de manera individual.
No obstante, debido a que las discusiones se encuentran en etapa inicial, podrían finalmente no conducir a nada.
En el caso de Nissan, el tercer fabricante japonés después de Toyota y Honda, hay dificultades serias ya que hace un mes anunció la supresión de nueve puestos de trabajo en el mundo y la reducción de un 20% de sus capacidades de producción.
De acuerdo al informe 'Estudio Global del Consumidor Automotriz 2024' elaborado la firma de servicios de auditoría Deloitte, en el año en curso hay una gama extensa de tópicos que afectan al sector aumotriz, incluidos el interés por las marcas y la tecnología y la percepción sobre automóviles eléctricos.
Los resultados del informe arrojan que existe una desaceleración de la intención de compra de vehículos eléctricos debido a las condiciones económicas mundiales inciertas.
Además, aunque la industria automotriz ha aumentado sus funciones de conectividad, esto no forzosamente se traduce en ingresos y ganancias, sino que por el contrario, puede incluso generar pérdidas significativas.
En el caso de México, el interés de adquisición en vehículos eléctricos se enfrenta a preocupaciones como infraestructura de carga, costos, desempeño, falta de conocimiento y modelos limitados.
Por otro lado, la capacidad económica de los compradores representa un tema crítico para la industria, ya que los consumidores esperan gastar menos de 750 mil pesos en su próximo vehículo.
Finalmente, casi dos tercios se cuestionan sobre la necesidad de adquirir un vehículo a futuro, ya que se han acostumbrado al transporte compartido y público, además de que entre la población joven de 18 a 34 años aumenta cada vez más el interés de renunciar a automóvil propio.
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