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Petróleos Mexicanos (Pemex) mejoró su situación financiera al cierre del primer trimestre de este año, pero no logra detener el deterioro operativo.
De acuerdo con su reporte financiero enviado a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), correspondiente al periodo enero-marzo de este año, obtuvo una utilidad neta de 113.3 mil millones de pesos, 29% mayor a la registrada en los primeros tres meses del año pasado, cuando se ubicó en 87.9 mil millones de pesos.
El resultado, explica el informe de la empresa, se basa en una utilidad cambiaria por 120.9 mil millones y un incremento de 11.1 mil millones de pesos en el rendimiento de los derivados financieros.
Por ello, el rendimiento de operación ascendió a 107 mil millones de pesos, lo que representa un crecimiento de casi 48% con relación al mismo trimestre de 2017.
De hecho, la mejora en las finanzas de la empresa hizo posible que entregue al fisco 108.9 mil millones de pesos en impuestos, derechos y aprovechamientos, monto 3.2% mayor que en 2017.
En su mensaje a los inversionistas, el director de Petróleos Mexicanos, Carlos Treviño Medina, comentó que “la empresa arrancó el año en el camino correcto, y continúa con los esfuerzos para mejorar sus indicadores operativos y financieros”.
No obstante, Pemex reporta una caída de 6.3% en la producción de petróleo crudo, al promediar una plataforma en el primer trimestre de un millón 890 mil barriles diarios, es decir, una disminución en los niveles de extracción de 128 mil barriles respecto al año anterior.
Un comportamiento similar se observó con la producción de gas de la empresa, que reportó una disminución de 10.2%.
En materia de ingresos, la petrolera reportó un aumento de 14.4% en sus ventas, derivado de mayores exportaciones (23.%), explicadas principalmente por la recuperación del precio del petróleo y de 9.2% en las ventas internas, que descansaron en la comercialización de gasolinas y diésel, ocasionado en su mayoría por mayores precios al consumidor.
David Ruelas Rodríguez, director corporativo de Finanzas de la empresa productiva del Estado, indicó en su mensaje que la empresa “mantiene finanzas estables. Las políticas de disciplina y austeridad implementadas desde 2016 han permitido estabilizar los gastos y mejorar los indicadores financieros. Hacia el futuro, Petróleos Mexicanos continuará haciendo esfuerzos para optimizar sus operaciones, así como para fortalecer sus resultados”.
Destacó que el incremento de las ventas en México también presenta un efecto importante por la nueva política de precios implementada a partir de 2017.
“Esta política modifica la fórmula de cálculo de los precios máximos de gasolinas y diésel, y reconoce los costos de distribución y logística, así como el efecto del tipo de cambio del peso frente al dólar.
Adicionalmente, a partir del 1 de diciembre de 2017, los precios de venta de gasolinas y diésel están completamente liberalizados en todo el país”, afirmó.