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Samsung presentó este miércoles, en Nueva York, su nuevo smartphone Galaxy Note 8, cuyo costo en México oscilará entre 20 mil y 23 mil pesos, de acuerdo con Claudia Contreras, directora de Mercadotecnia de Samsung México.
Con este precio, cuando el Note 8 llegue a México, el próximo 5 de octubre (la preventa online inicia el 26 de septiembre), el smartphone se convertirá en el más costoso en su categoría. Modelos con los que competirá este equipo, como el iPhone 7 Plus o el Sony Xperia XZ Premium, cuestan alrededor de 18 mil pesos.
Medios estadounidenses especializados en tecnología, como Mashable, señalaron al respecto: “De hecho, el Note 8 es el teléfono más caro de Samsung y cuesta mucho más que el iPhone 7 Plus”.
Agregó: “Los precios de los carriers están empezando a fluir y parece que el Note 8 costará entre 900 y 960 dólares. ¡Vaya! Para comparar, el iPhone 7 Plus comienza en 770 dólares”.
Entre las principales características de este dispositivo está su pantalla de 6.3 pulgadas Infinity Display que reduce al máximo los bordes y ofrece una relación de aspecto 18.5:9 (hasta ahora, el estándar en la industria era el formato “panorámico” 16:9) que es más alargada y adaptativa en diversas aplicaciones.
Otra innovación es la S Pen, una pluma digital que ahora, aseguraron representantes de Samsung, es sensible a más de 4 mil puntos de presión por lo que mejora la exactitud de los trazos. También destaca su doble cámara principal de 12 megapixeles, su memoria RAM de 6 GB, su procesador de 8 núcleos y su almacenamiento interno de 64, 128 o 256 GB.
Asimismo, el dispositivo tiene una certificación IP68 que lo hace resistente al polvo y a inmersiones en agua dulce por media hora hasta a un metro y medio de profundidad.
En entrevista con EL UNIVERSAL, Mario Laffitte, vicepresidente de Asuntos Corporativos para Samsung en América Latina, comentó que con este nuevo integrante de la familia Note la compañía busca dejar atrás los problemas presentados por su predecesor, el Galaxy Note 7.
Y es que el año pasado, semanas después del lanzamiento internacional del Note 7, este producto fue retirado totalmente del mercado global, ya que sus baterías presentaban defectos y eran propensas a explotar.
Al respecto, a mediados de octubre de 2016 la agencia EFE reportó que Samsung estaría teniendo pérdidas del orden de 3 mil 100 millones de dólares. Sin embargo, sin compartir cifras, Laffitte aseguró que después del mencionado incidente, la empresa decidió impulsar, mediante campañas de marketing, al otro modelo premium que en ese momento tenían. “Buscamos que el Galaxy S7 supliera las ventas del Note 7 para la segunda mitad del año pasado. Eso se logró. Tuvimos un muy buen año en 2016”.
Este año, acotó el directivo de Samsung, se siguió con el curso normal del negocio: “Tener un flagship en la primera mitad del año con el Galaxy S8 y otro en el segundo semestre, con este nuevo Note 8”.