El Gobierno de Estados Unidos interpuso hoy una demanda ante la Corte Federal del Distrito de Columbia con el objetivo de impedir la fusión entre AT&T y el grupo Time Warner , por considerar que dicha operación "dañará a los consumidores" al reducir la competencia en el sector.
"Si se permite que se ejecute, esta fusión dañará a los consumidores al reducir sustancialmente la competencia en el sector tradicional de distribución y al ralentizar la competencia 'online'", señala el Departamento de Justicia en la demanda.
El texto argumenta que esta falta de competitividad redundaría en un incremento de los precios, lo que "conllevaría facturas aún más altas para los estadounidenses".
El acuerdo entre ambas empresas, que se habría cerrado en torno a los 108.000 millones de dólares, podría ser una de las mayores fusiones de la historia del país.
Entre los diversos productos que podrían quedar englobados en el acuerdo se encuentran las cadenas CNN y TNT, canales de entretenimiento como HBO y los estudios Warner Bros, así como los derechos de retransmisión de las ligas nacionales de baloncesto y beisbol.
"No tenemos ninguna intención de que vaya más allá de lo que exige el cumplimiento de la Ley", declaró en una rueda de prensa celebrada tras la presentación de la demanda el presidente de AT&T, Randall Stephenson, quien dijo que nunca había visto "una oposición así" a un acuerdo comercial por parte del Departamento de Justicia.
En las últimas semanas diversos medios de comunicación habían apuntado que la Administración del presidente Donald Trump habría puesto como condición para aprobar la fusión que se vendiera el canal de cable CNN, una de las joyas del grupo Time Warner, o el canal por satélite DirecTV, propiedad de AT&T.
En este sentido, la demanda acusa a Time Warner de haber entorpecido esta opción al haber pedido un precio demasiado alto por el canal informativo.
Stephenson no descartó que, en realidad, la situación obedezca a la tensa relación entre Trump y la CNN, a la que acostumbra a descalificar con el apelativo de "noticias falsas" y a la cual ya advirtió durante la pasada campaña electoral de que, en caso de alcanzar la presidencia, rechazaría cualquier posible fusión.
Según datos oficiales, AT&T obtuvo en 2016 beneficios por 163.000 millones de dólares, lo que la convierte en la mayor empresa de telecomunicaciones en el mundo, mientras que Time Warner presentó en ese mismo período beneficios por valor de 29.300 millones, derivados de su presencia en más de 90 millones hogares del país.