La jefa del Servicio de Administración Tributaria (SAT), Raquel Buenrostro Sánchez, anunció que en el paquete 2022 se presentará una miscelánea fiscal con un sentido de justicia social.
No contendrá ni nuevos impuestos ni aumento a las tasas de los existentes; serán facilidades administrativas para mejorar el cumplimiento y combate a la evasión que dejará 200 mil millones de pesos, delineó.
“Una reforma fiscal lo único que va a hacer es que los cautivos paguen más y los demás sigan pagando lo mismo o cada vez menos; eso no se busca. Se está buscando justicia social”, detalló.
En conferencia de prensa, dijo que no será una reforma fiscal como las tradicionales que se presentaban antes, en las que subían impuestos y toda la carga era para los asalariados que pagaban por los que no cumplían en forma.
Serán facilidades administrativas y digitales para hacer más simple el pago y trámites y, por otra parte, para dar certeza jurídica con precisiones legales a grandes contribuyentes, sin dejar de combatir la evasión fiscal para evitar planeaciones agresivas que terminan en una defraudación.
“Básicamente esos serían los dos grupos que se van a presentar en la miscelánea fiscal”, acotó al presentar la publicación de las tasas efectivas que deberán pagar los grandes contribuyentes para evitar una evasión de 700 mil millones de pesos.
Por esa razón, afirmó que hay espacio para no tener una reforma fiscal sin tocar a los asalariados, y que siga siendo sustentable la recaudación.
Refirió que el año pasado se realizaron cerca de 800 auditorías a grandes contribuyentes y para el resto 100 mil.
Vigilancia profunda
Con las tasas efectivas que dio a conocer el SAT en materia de ISR para corporativos, los grandes contribuyentes deberán cotejar esta información con sus declaraciones anuales.
Buenrostro Sánchez señaló que con ello se verá si pagaron menos por planeaciones fiscales agresivas, pues con base en datos duros tributan con tasa del ISR casi 19 veces menor respecto a personas físicas y casi ocho veces debajo que sueldos y salarios.
“Los grandes contribuyentes se quejan y se hacen mártires, pero lo cierto es que pagan menos de lo que debe ser”, acusó.
Por eso, el SAT cuenta con la vigilancia profunda para que los contribuyentes vean esas diferencias, por cuya vía el año pasado recaudaron cerca de 100 mil millones de pesos.
El administrador general de Grandes Contribuyentes, Antonio Martínez Dagnino, informó que hasta el momento no tienen auditorías abiertas.
Con este indicador, valorarán si se envían cartas-invitación o vigilancias profundas y tendrán el procedimiento normal con una auditoría para revisar ingresos, gastos y partes relacionadas del ISR y del IVA. De ahí, el contribuyente podrá hacer la autocorrección o liquidación.
