Si se consideran los ingresos tributarios que se perciben, como proporción del Producto Interno Bruto (PIB), México tiene un gobierno chico, afirmó el exsecretario General de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), José Ángel Gurría Treviño.
Ayer, durante el Encuentro por México organizado por la Confederación Patronal de la República Mexicana(Coparmex), expuso que esa relación es de 13%, y aunque sumando los ingresos petroleros se alcance una proporción de 17% respecto al tamaño de la economía del país, no es suficiente para atender los rezagos.
“México tiene un gobierno chiquito. Ustedes a lo mejor sienten que el gobierno es muy grande y que anda por todos lados. ¿Por qué [es chiquito]? Porque la fuente de ingresos del gobierno es sólo 13% del PIB, y si le sumas el petróleo llega a 17% del PIB”, manifestó.
“El gobierno sólo tiene 17% del PIB, como una sexta parte del producto nacional del Producto Interno Bruto, para administrar gastos de salud, infraestructura, salud, educación, agua, de seguridad, la policía, Guardia Nacional, y [el promedio de] la OCDE anda en 34%, el doble”, indicó.
El también exsecretario de Hacienda y de Relaciones Exteriores durante el sexenio de Ernesto Zedillo aseguró que el problema es que el presidente Andrés Manuel López Obrador y los responsables de las finanzas públicas no quieren aumentar la deuda o el déficit del país.
“Si le suman que el Presidente y los sucesivos secretarios de Hacienda, ahora el señor [Rogelio Ramírez] de la O, [Arturo] Herrera, [Carlos] Urzúa, que son responsables desde el punto de vista fiscal, quiere decir que no quieren aumentarle mucho a la deuda y seguir con su 17%, un gobierno chiquito, no pueden hacer cosas”, explicó.
Expuso que no se trata de pasar de 17% a 50% del PIB, como ocurre con Dinamarca, pero “entre 17% y 34% hay un buen espacio, y cada punto más quiere decir que se puede hacer una escuela más, dar agua a un pueblo, una carretera, y mejorar el nivel de bienestar de las personas”.
El problema actual es que México tiene casi la mitad de su población en pobreza, más de 60% de trabajadores en activo son informales y hay baja productividad, además de que 42% del gasto en salud lo pagan los pacientes sobre las medicinas, aunque tengan muchas carencias.
Por eso la administración actual debe dar recursos, señaló, “cheques” a quienes menos tienen, y está bien si quiere empezar por los adultos mayores.
“El problema es que es un gobierno chiquito, con ingresos chiquitos. Eso impide que se pueda ayudar o apoyar de manera inclusiva, o inversiones de infraestructura para atender mejor a la población”, afirmó.
Reforma energética
Gurría Treviño afirmó que si el gobierno impulsa una reforma energética que cambie lo hecho anteriormente, debe estar consciente de que tendrá un costo.
“El fondo del asunto es confianza, confianza, confianza. Es el respeto a los tratos y es una parte importante de los acuerdos. Pero si un gobierno decide que va a cambiar [la ley], entonces habrá consecuencias legales y financieras, las cuales habrá que afrontar”, expuso.
Detalló que los inversionistas buscan estabilidad política, social, y predictibilidad en regulación: “Una vez que se ponen regulaciones, que se mantengan y respeten, y uno pueda tomar decisiones con base en la regulación, de que así seguirá, y cuando uno termine de construir una fábrica, que esas sean las bases sobre las que se puede operar”, afirmó el exfuncionario.