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La calificadora Standard and Poor’s advirtió que México no cuenta con condiciones sostenibles para crecer a 4%, en un entorno de baja inversión e impacto en la actividad económica por la inseguridad que se vive en el país.
En conferencia, recalcó que México históricamente no ha sido un país que crezca mucho, con lo que el bajo desempeño económico que enfrenta es uno de los principales factores que explica la perspectiva negativa de la nota crediticia de la agencia, ubicada en BBB+.
“En nuestras proyecciones no tenemos 4% (...) el gobierno no tiene 4% en su presupuesto, y cuando observo el Paquete Económico 2020, tampoco”, dijo Lisa Schineller, analista para México.
En opinión de los especialistas, la baja intermediación financiera y la falta de inversión son factores históricos que provocan el bajo crecimiento, además, ningún país en América Latina tiene las condiciones para expandirse 4%.
“Mientras estas condiciones objetivas que no son de izquierda o de derecha se mantengan tan bajas, va a ser muy difícil alcanzar de manera sustentable este crecimiento”, expuso Sebastián Briozzo, analista de la agencia.
Divergencias
Sobre las críticas del presidente Andrés Manuel López Obrador a los comentarios de las calificadoras sobre su administración, los analistas de Standard and Poor’s dijeron que la agencia tiene una opinión independiente, con más de 30 años de operación en el país, por lo que siempre existirán divergencias.
En materia de inseguridad, la firma destacó que ha sido un problema histórico que ha impactado en el crecimiento del país.
“Hemos notado que la inseguridad es un costo de oportunidad para el ritmo de crecimiento de México. No solamente ahora sino durante la administración de Calderón, Peña Nieto, etcétera. Con menos inseguridad probablemente el nivel de crecimiento sería más fuerte”, precisó Schineller.
Pemex
La agencia expuso que si bien la situación financiera de Petróleos Mexicanos (Pemex) es otro factor que impacta sobre las finanzas del país, detalló que cualquier movimiento en su calificación está atada al desempeño de la nota crediticia de México.
“La perspectiva negativa refleja un riesgo de la deuda de Pemex impactando al soberano, si se incluye la deuda de Pemex con la del gobierno, en un momento dado, la combinación puede impactar de manera negativa sobre el soberano, y al final a la calificación de Pemex”, apuntó Schineller.
Amenaza mayor
Si no se reanudan las asociaciones entre el sector público y la iniciativa privada en Pemex (farmouts), la deuda del gobierno federal va a perder el grado de inversión por parte de las principales agencias calificadoras, advirtió Carlos Serrano, economista en jefe para México de BBVA.
“Si no se reanudan los farmouts, [la nota soberana] puede llegar a perder el grado de inversión, no ahora, pero en unos tres o cuatro años, simplemente porque no hay espacio fiscal para que este apoyo [el asignado a Pemex] venga del gobierno”, dijo durante la celebración de la 47 convención del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF).
En el acto, Alonso Cervera, economista en jefe para México de Credit Suisse, anticipó que la nota soberana será degradada en 2020 por Standard and Poor’s y Moody’s, pero manteniendo el grado de inversión, proyección con la que coincidió el presidente del Comité de Estudios Económicos del IMEF, Gabriel Casillas.
La deuda soberana mexicana ostenta un nivel de grado de inversión por parte de Moody’s, Fitch y Standard and Poor’s, cuya calificación tiene un peso importante en la determinación de la nota de instituciones públicas y empresas privadas, porque representa el anclaje de expectativas.