La Secretaría de Hacienda y Crédito Público ( SHCP ) consideró desafortunado que la agencia Fitch Ratings penalice doblemente el balance financiero del país.
En respuesta a la baja en las calificaciones de riesgo soberano y de Petróleos Mexicanos ( Pemex ) y el cambio de perspectiva a negativa, dijo no estar de acuerdo.
“El Gobierno expresa su fuerte desacuerdo con el enfoque aplicado por esta calificadora”.
La SHCP ratificó su compromiso con la disciplina fiscal y la estabilidad macroeconómica, y ponderó que a través de mantener unas finanzas públicas fuertes es posible obtener una mayor resiliencia y márgenes de maniobra para hacer frente a los efectos de situaciones económicas adversas provenientes del exterior.
En un comunicado, esgrimió que por el lado del riesgo soberano argumentan que los riesgos a las finanzas públicas se han incrementado por que la deuda de Pemex representa pasivos contingentes para el Gobierno Federal, asumiendo así un apoyo inminente a la entidad.
Pero al mismo tiempo, la agencia penaliza la calificación de Pemex por considerar que el respaldo del Gobierno Federal es moderado e insuficiente.
Acusó que esta acción sobre la calificación soberana de México y de Pemex se da aún cuando se demostró el apoyo total del Gobierno Federal a la empresa, y se está trabajando en dar una solución a los problemas estructurales y financieros de esta.
Reiteró su compromiso del gobierno federal con Pemex, ya que seguirá apoyándola para consolidarla como una empresa eficiente y rentable en el mediano y largo plazo con medidas estructurales y de liquidez.
Pemex es parte integral de la economía nacional, aseguró.
Consideró que vale la pena resaltar que Fitch estabiliza la perspectiva de la calificación soberana de México de negativa a estable, con lo cual establece un piso al ajuste de la calificación y no se esperan más acciones sobre el soberano.
En tanto que Moody’s Service, ratificó la calificación soberana de México (A3, 2 grados por encima de Fitch Ratings).
Al mismo tiempo, se modificó la perspectiva de la calificación de estable a negativa con lo cual establece una línea de tiempo de 18 meses para una potencial revisión de la calificación.
Con respecto a Pemex, Moody’s realizó una revisión de la perspectiva de calificación de Pemex de estable a negativa, refirió Hacienda.