México perdió más inversión de cartera o capital golondrino el año pasado, pese al rebote de la economía tras la pandemia.
Con ello, sumaron siete trimestres en que los extranjeros desinvirtieron en valores respaldados por el gobierno mexicano, pues mantiene un saldo negativo desde abril de 2020, cuando iniciaba la emergencia sanitaria.
Se trata del periodo de salidas consecutivas más largo desde que se registraron nueve trimestres seguidos en rojo, de abril de 1986 a junio de 1988, durante la época del presidente Miguel de la Madrid Hurtado.
De acuerdo con el reporte de la balanza de pagos que dio a conocer ayer el Banco de México (Banxico), inversionistas foráneos se deshicieron el año pasado de 41 mil 557 millones de dólares que mantenían en inversiones en Certificados de la Tesorería de la Federación (Cetes), Bonos públicos y privados.
Este monto es cuatro veces superior a los 10 mil 344 millones de dólares que los extranjeros retiraron de sus portafolios de inversión en cartera durante 2020.
En cambio, los mexicanos con depósitos en el extranjero retornaron sus recursos al país por un total de 6 mil 964 millones de dólares durante 2021.
Mientras que, en 2020, habían preferido aumentar sus activos fuera del país en 23 mil 184 millones de dólares.
Tras haber incrementado sus depósitos en el exterior entre enero y junio de 2021, en 653 millones de dólares y 7 mil 591 millones de dólares, respectivamente, decidieron regresar sus capitales a México durante la segunda mitad del año pasado.
Banxico destacó que los movimientos de capitales se dieron en un contexto en el cual, los mercados financieros internacionales registraron un desempeño favorable a lo largo de 2021.
La autoridad lo relacionó con los avances en los niveles de vacunación y la mejoría en las perspectivas económicas.
Aunque destacó que, en 2021, también hubo episodios de volatilidad derivados de la incertidumbre asociada con la evolución de la pandemia y su impacto sobre la recuperación económica global, el significativo aumento de la inflación y la expectativa de un retiro más acelerado del estímulo monetario a nivel global.
El banco central señaló que la actividad económica mundial se recuperó en el transcurso del año pasado, de manera heterogénea entre sectores y países.
Esto se dio en un entorno de desbalances entre la oferta y la demanda ante los persistentes cuellos de botella en las cadenas de suministro y las restricciones a la movilidad asociadas con los repuntes en los contagios derivados por la aparición de las nuevas variantes del Covid-19.
Banxico afirmó que la economía mexicana continuó captando recursos por concepto de inversión directa y de otra inversión.
Respecto a la Inversión Extranjera Directa (IED), BBVA destacó que México captó 32 mil 338 millones de dólares en 2021 contra 22 mil 551 millones de dólares en 2020, lo que significó un aumento de 43.4%, según datos preliminares contenidos en la balanza de pagos que difundió la autoridad monetaria.
Estableció que si bien será necesario esperar un tiempo para conocer las cifras definitivas del año pasado y reconocer que la comparación resultó favorable por el mayor impacto económico de la crisis sanitaria en 2020, el buen desempeño de la IED sugiere una normalización de los flujos productivos, ante la recuperación de la demanda externa y la continuidad de los beneficios de la integración a las cadenas globales de valor.