México es el único país en América Latina que fabrica autos eléctricos y las armadoras instaladas en el país ya comenzaron a producir y exportar algunos modelos.

En 2020, Ford fue la primera automotriz en fabricar un auto eléctrico en territorio ncional para exportación: el Mustang Mach-E eléctrico. A partir de octubre de este año se suma General Motors (GM), con la fabricación de Equinox y Blazer eléctricas.

En total, se fabricaron 91 mil 729 vehículos eléctricos en el país de enero a noviembre, de acuerdo con cifras del Inegi.

Ford fabricó 90 mil 308 unidades de Mustang Mach-E en su planta de Cuautitlán Izcalli, Estado de México, que se exportaron en su mayoría a Estados Unidos, pero también a Alemania, Argentina, Australia, Brasil, Nueva Zelanda, Puerto Rico, Sudáfrica y Taiwán.

En medio de la huelga del sindicato automotriz estadounidense, en octubre, GM inició la producción de la Equinox EV eléctrica en su fábrica de Ramos Arizpe, Coahuila, modelo del que ha producido 961 unidades en dos meses.

La mayor parte de la producción de Equinox EV se envió a Brasil y el resto a Estados Unidos, Argentina, Colombia y Uruguay.

De acuerdo con datos del Inegi, GM también fabricó 460 unidades de Blazer eléctrica.

Francisco Garza, presidente y director general de GM de México, comentó recientemente que la incorporación de los autos eléctricos a la producción local les permitirá consolidarse como la armadora con el mayor volumen de exportación este año.

“Nos hemos convertido por varios años en el mayor exportador del sector automotriz con más de 580 mil unidades a más de 30 destinos a nivel global.

“También somos el productor número uno en la industria automotriz. En Ramos Arizpe, Coahuila ya fabricamos vehículos eléctricos”, dijo Garza.

GM anunció en 2021 una inversión de mil millones de dólares para la planta de Ramos Arizpe con el fin de adecuarla para la producción de los modelos eléctricos Blazer y Equinox para exportación, pero también para satisfacer la demanda del mercado mexicano.

Se espera que, también en esta planta, se fabrique un modelo de Honda (Prologue), un crossover eléctrico para América del Norte.

Eric Ramírez, director regional Latam de Urban Science, explicó que la electrificación en México tiene dos ejes: la manufactura y el mercado doméstico.

En manufactura, se estima que la producción total de autos alcance 4 millones de unidades en 2030, gracias a la incorporación de los autos eléctricos.

“La manufactura es un proyecto mucho más grande porque es para exportación, sobre todo hacia Norteamérica”, dijo.

Otros proyectos

BMW anunció en febrero una inversión por 800 millones de euros para ampliar la planta de San Luis Potosí donde fabricará el Serie 3e, un híbrido enchufable, además de baterías eléctricas, en 2027.

También en 2027, Audi fabricará una versión completamente eléctrica de la Q5 en la planta de Puebla, aunque desde 2019 fabrica una versión híbrida enchufable.

En marzo, Tesla confirmó la instalación de una planta en Santa Catarina, Nuevo León, donde fabricará un nuevo vehículo eléctrico de nueva generación. La inversión de la armadora rondará los 4 o 5 mil millones de dólares.

Stellantis también tiene planeado fabricar vehículos eléctricos en el país: la RAM Promaster y una Jeep eléctrica.

Por su parte, Volkswagen destinará 763 millones de dólares para adaptar la planta de Puebla para el ensamble de SUV eléctricas, pero la empresa aún no da detalles de que modelos serán.

Además, la china BYD también está evaluando fabricar vehículos eléctricos en el país.

Las ventajas

Gerardo González Durán, director regional en Guanajuato para American Industries Group, destacó que el año pasado, México exportó vehículos eléctricos a Estados Unidos por un valor de 2 mil 636 millones de dólares, ubicándose entre los cuatro países con mayor exportación de vehículos eléctricos hacia ese país después de Japón, Corea del Sur y Alemania.

“La industria de los vehículos eléctricos en México es cada vez más cercana, una realidad latente, tanto su crecimiento de producción como su aumento en ventas.

“Tan sólo en la parte de manufactura se prevé un aumento de producción de vehículos eléctricos muy importante al cierre del año; mientras que la comercialización podría duplicarse con la llegada de nuevas marcas chinas”, indicó.

En su opinión, México cuenta con ventajas para manufacturar autos eléctricos como su proximidad con Estados Unidos, acuerdos comerciales, mano de obra calificada, recursos naturales e integración productiva en América del Norte.

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