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La desaceleración económica que se vive en México no disminuyó el consumo de proteína cárnica, pero modificó algunos hábitos de las familias, de forma que el cerdo es el producto más consumido y, en el rubro de las carnes frías aumentó el uso de mortadela como plato fuerte.
La directora del Consejo Mexicano de la Carne (Comecarne), Carla Suárez Flores, mencionó: “Si bien este año se ha visto una desaceleración, el consumidor privilegia siempre el gasto hacia la proteína cárnica, tiene muy clara la importancia de la proteína en una dieta balanceada”.
A pesar del entorno económico, el consumo sigue y se ha mantenido el crecimiento.
“Probablemente cambie la mezcla, es decir, si compraba una vez a la semana milanesa de res, ahora voy a comprar dos veces milanesa de pollo, o si al sándwich del lunch le ponía dos rebanadas de jamón, ahora le voy a poner una”, dijo.
El reto de la industria es mantener la competitividad, afirmó: “Sabemos que somos los que mejor calidad de proteína damos. En el caso de carnes frías, salchichas y mortadelas se usan empanizadas como plato fuerte a la hora de la comida. Las salchichas se ponen en el arroz y podemos poner esos productos de manera competitiva”.
En carnes frías, para 2019 se estima una producción de 753 mil toneladas, lo que representa un crecimiento de 0.7% en comparación con 2018.
La importación de las carnes frías sigue en aumento, ya que se pasó de 12 mil 293 toneladas en 2014 a 13 mil 762 en 2018.
La mayor producción es de carnes frías y conservas de carne de ave, con 50%. En segundo lugar están los jamones de carnes rojas, con 22%, en tanto que el restante 28% corresponde a otros tipos de carnes frías.
La salchicha de ave también registra un incremento en su producción, que llegó a 290 mil toneladas, así como el jamón de pavo, a 194 mil 500 toneladas.
De acuerdo con las estadísticas del consejo, la proteína que más se consume es el cerdo, seguida del pollo y la carne de res. Hasta octubre de 2019 se produjeron en el país 5.9 millones de toneladas de carne de pollo, pavo, cerdo, res, ovino y caprino, 4.1% más que en el mismo periodo de 2018.
Recientemente, Comecarne firmó un convenio con la Universidad Autónoma Chapingo para impulsar la investigación e innovación en la industria cárnica, un sector que representó 25.9% agroalimentario y 1.8% del PIB nacional en el primer trimestre del año.