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maria.saldana@eluniversal.com.mx
A pesar de las acciones para evitar la evasión y elusión fiscal, un alza de los ingresos tributarios puede frenarse por el crecimiento marginal que se espera en México, advirtió el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).
Si bien en el paquete económico 2020 se espera un aumento de 3.7% en la recaudación tributaria, ello dependerá de que se alcancen las variables de crecimiento de entre 1.5% y 2.5%, de la reactivación de la producción petrolera, de que se instrumenten mejor las medidas que ampliarán la base gravable y de las acciones para combatir la evasión y elusión tributaria.
En el Análisis Económico Ejecutivo semanal del CEESP, el organismo explicó que un aumento de los ingresos al erario también “se relaciona con que la expectativa de crecimiento, a pesar de que mejora marginalmente, sigue siendo baja y es una posible limitante para un alza de ingresos tributarios”.
El centro resaltó que el gobierno basa sus cálculos en cifras “optimistas”, al elevar el rango de crecimiento de entre 1.4% y 2.4% que calculó en los Precriterios Generales de Política Económica para 2020 a un rango de 1.5% a 2.5% en el Paquete Económico 2020 que entregó el domingo pasado.
Consideró que pueden haber sobreestimado la cifra del PIB porque “se apoya en el efecto de un aumento en la plataforma de producción de petróleo de 224 mil barriles por día, respecto a lo esperado para el año”, lo que considera los apoyos que se darán a Pemex.
“Evidentemente este pronóstico se ve muy optimista tras observar el constante ritmo de caída que la plataforma ha mantenido desde inicios de 2004”, abundó el documento del CEESP.
Sobre el destino del gasto para el próximo año, el organismo informó que el gobierno estima que con la mayor recaudación continuará el apoyo a los “proyectos insignia”, como el que se destina a jóvenes y los de infraestructura, como el Tren Maya, el aeropuerto de Santa Lucía y la refinería de Dos Bocas, en Tabasco, los cuales “aún no demuestran su rentabilidad social”.
Además de que pretende que las participaciones a entidades se eleven 1.8% respecto a este año.
El CEESP manifestó en el análisis su preocupación por la persistente reducción en inversión
física del sector público, ya que para 2020 se proyecta una disminución de 5.4%.
