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De acuerdo con Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México (GACM), el mantenimiento de cada una de las pistas del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) será de 350 millones de pesos al año, cifra menor a los 460 millones que se pagan en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM).
El costo del mantenimiento de las pistas es uno de los principales argumentos que el equipo del próximo presidente, Andrés Manuel López Obrador, ha manejado contra la edificación del NAIM en Texcoco.
“Sí es un poco más caro que el que tenemos en el actual aeropuerto en la construcción, pero el mantenimiento es menor, a diferencia de lo que se ha dicho que es más caro”.
“El año pasado se le dio mantenimiento a la pista 5 derecha (del AICM), el costo del mantenimiento fue de 460 millones de pesos. Es el costo de una pista. Sin embargo, en el caso de las pistas del NAIM, que además son más grandes, cinco kilómetros en lugar de cuatro kilómetros de las actuales, el costo es de 350 millones de pesos pero entre cinco y ocho años, por pista”, explicó.
El sistema de precarga consiste en colocar capas de tezontle y enrocamiento basáltico sobre el terreno para que el peso hunda de manera artificial la pista y luego retirar esa precarga y colocar asfalto.
Así, el primer mantenimiento que requerirán las pistas del NAIM será hasta dentro de ocho años después de inaugurada la terminal.
Al respecto, el doctor Manuel Jesús Mendoza, investigador titular de la Coordinación de Geotecnia del Instituto de Ingeniería de la UNAM, quien junto con un equipo de investigadores colabora con Netherlands Airport Consultants (NACO) en la definición del sistema de precarga para la cimentación de las pistas del NAIM, coincidió en que este sería el costo aproximado de conservar las pistas del nuevo aeropuerto.
“Los diseñadores tienen como objetivo que el mantenimiento que se debe dar a las pistas sea cada ocho años y no anual, como ocurre en el actual aeropuerto”.
Mendoza dijo que incluso el terreno en donde se construye el aeropuerto se hunde menos que el terreno del AICM, pues se sume 13.2 centímetros al año en comparación con los 21 y hasta 35 centímetros que se sume el área noreste del AICM.
Efraín Ovando, subdirector de Estructuras y Geotecnia del Instituto de Ingeniería de la UNAM, agregó que en Tailandia y China se utilizó un esquema de precarga similar al del NAIM para hacer la cimentación de pistas de otros aeropuertos.
“A la conclusión que hemos llegado diferentes expertos y el Instituto de Ingeniería de la UNAM es que sí se puede construir el nuevo aeropuerto en Texcoco”, indicó.
Ovando reiteró que hay otros asuntos técnicos relativos al NAIM como espacio aéreo, costos y comodidad de tener las operaciones nacionales e internacionales en una sola terminal en lugar de dos, que no tienen nada que ver con la mecánica de suelos, tema en donde el terreno de Texcoco sí es viable.
Ambos coincidieron en que para determinar si el suelo en Santa Lucía es apto se requieren estudios que tardarían hasta dos años.