A causa de la pandemia de Covid-19, los precios de los alimentos se incrementaron en niveles preocupantes, lo que pone en riesgo la meta de eliminar el hambre en el mundo, afirmó la Conferencia de las Naciones Unidas para el Comercio y el Desarrollo (UNCTAD, por sus siglas en inglés).
Los países en donde más se resiente esta situación son los menos desarrollados, en donde los niveles inflacionarios registraron una tasa promedio de 6% entre enero de 2020 y marzo de 2021.
Sin embargo, hay naciones en las que la inflación de alimentos llegó a 162%, como en Sudán; en Angola, 26.8%; Haití, 26.2%; Etiopía, 23%; Liberia, 19.3%; Zambia, 18.5%; Sierra Leona, 14.7%; Guinea, 13%, y Ruanda, 12.9%.
Otro problema que observa la UNCTAD es que, globalmente, la dificultad para alcanzar la seguridad alimentaria afectó en 10% más a mujeres que a hombres durante el año pasado, en comparación con 2019.
Ante esta situación, el organismo sugirió dar vales de comida, sobre todo donde las personas sufren por dificultades para acceder a alimentos, derivado de eventos climatológicos o plagas. También urgió a tener políticas y estrategias para otorgar comida nutritiva a las personas mal nutridas.
Tampoco se debe olvidar que, para mejorar los cultivos, se debe apoyar a los campesinos para tener mejores prácticas agrícolas, caminos, sistemas de electrificación y sistemas de riego, entre otros aspectos.
De no hacerlo, alertó que sigue en riesgo el cumplimiento de uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Organización de las Naciones Unidas para 2030, que es eliminar el hambre.
En México, la falta de acciones del gobierno federal no sólo no revirtió el problema de la pobreza, sino que tampoco evitó que más personas vivan en esa situación actualmente, dijo la Coparmex.
El sindicato patronal se refirió a los datos que dio a conocer el jueves el Coneval, respecto a que el número de personas en situación de pobreza en el país pasó de 51.9 a 55.7 millones de personas entre 2018 y 2020.