Madrid.— Organizaciones internacionales, sectores y ONG vinculados al mar celebraron este sábado el Día Mundial de la Pesca para realzar la labor de 55 millones de trabajadores.
Desafíos laborales, la lucha contra el pescado ilegal y la inquietud por el impacto sanitario y económico del Covid-19 marcan esta conmemoración, impulsada por las comunidades pesqueras y refrendada por entidades como la Organización de la ONU para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
“El sector pesquero tiene una naturaleza única; es exigente y gratificante a la vez”, ha subrayado el director de la Unidad Marítima y de Transporte de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Brandt Wagner.
La pesca es el sustento de 55 millones de trabajadores, 40 millones de ellos a bordo de un buque, de acuerdo con datos difundidos por Wagner en un seminario virtual organizado por los sindicatos de la Unión Europea (UE).
Según datos de la ONU citados por la patronal española Cepesca, si se suman puestos indirectos, la pesca da trabajo a 200 millones de personas y 800 millones de habitantes del planeta dependen de la cadena de valor de producción y venta de pescado y marisco.
España es la primera potencia pesquera de la Unión Europea, con 8 mil 884 barcos y más de 30 mil tripulantes.
El secretario general de Cepesca, Javier Garat, afirma que todo el mundo “debería subir una vez en su vida en un barco” para pasar un día faenando, con el fin de conocer las condiciones de trabajo.
Garat aboga por una nueva narrativa de la pesca, para que los ciudadanos la vean “como parte de la solución y no un problema” a la hora de pensar en el estado de los océanos.
En esa línea, resalta su papel en el suministro de alimentos y en la protección ambiental.
Cita que los últimos informes científicos han demostrado una mejora de los caladeros en el Atlántico; en el Mediterráneo, reconoce que la situación es más delicada.
El presidente de la Federación Nacional de Cofradías Pesqueras de España, Basilio Otero, califica como “otra vuelta de tuerca” la caída de precios y de ventas de pescado a causa de los cierres de hoteles por la pandemia de Covid-19.