Cancún.— El movimiento de migrantes por el cierre de las aduanas en Texas, la suspensión de trenes de carga y la reciente caída del sistema de aduanas mexicanas frenan el comercio entre el país y Estados Unidos, advirtió Israel Delgado, vicepresidente de la región Noroeste de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar).
Además de las aduanas en la frontera con Texas, se espera que se cierren otras en Arizona, aunado a la saturación de cruces y, en algunos casos, las aduanas fronterizas estadounidenses operan a 20% de su capacidad, porque se quitó personal para atender el tema migratorio.
“Se conjugan dos fenómenos, la caída del sistema que se tuvo en esta semana de la Agencia Nacional de Aduanas de México (ANAM), donde se cayó el sistema informático en toda la frontera” el lunes pasado, pero también se mantienen las intermitencias en el sistema, comentó.
Por otro lado, “el gobierno de Estados Unidos, particularmente el de Texas, aplica una restricción por el cruce masivo de migrantes y un protocolo de seguridad nacional (cierra aduanas) sobre todo en Texas.
“Sin embargo, se nos ha informado que también la frontera con Arizona, no se cierra a 100%, pero sí nos han informado que se van a quitar elementos de CBP (Aduanas de Estados Unidos) para reforzar las acciones de migración”.
Refirió que en Juárez hubo un impacto dramático pues se redujo en más de 80% el cruce de mercancías, “esperamos que estas medidas que Estados Unidos está tomando no se extiendan a demás fronteras”, porque en Tijuana hay cruces de 4 mil camiones al día y bajó a 2 mil.
El integrante de la Canacar abundó que los tiempos de cruce en algunos puentes fronterizos por donde sale mercancía de exportación de México a Estados Unidos aumentaron en seis u ocho horas, al cerrarse Córdova-Américas y Eagle Pass.
Aunque actualmente podemos hablar de un “impacto de al menos 50% del comercio” considerando la afectación por la decisión de mover a agentes de aduanas estadounidenses a tareas de migración.
El presidente de la Asociación Nacional de Transporte Privado (ANTP), Leonardo Gómez Vargas, consideró que el que se hayan suspendido las operaciones de trenes de carga de Ferromex debe llevar al gobierno a atender el tema migratorio para evitar efecto en el comercio.
De la decisión estadounidense de mover al personal de aduanas a acciones migratorias y cerrar las aduanas de Eagle Pass, frontera con Piedras Negras, Coahuila, y la de Córdova-Américas, en Ciudad Juárez, Chihuahua, dijo que afecta las operaciones de comercio exterior que no trabajan a 100%.
Porque al cerrarse estas aduanas, los transportistas tienen que buscar otra aduana por dónde salir y esto genera mayores costos de operación y más tiempo de cruce.
Lo que se requiere, comentó, es atender esta ventaja que nos da estar al lado del territorio estadounidense, porque “todo aquello que retrasa la operación o el justo a tiempo afecta”, se generan penalizaciones por no llevar a tiempo la carga.
Gómez Vargas indicó que por eso se pide que no se afecte el comercio y el movimiento de mercancías, queremos que se “atienda correctamente”, necesitamos mover la carga de manera segura y a tiempo.
“Hay problemas muy serios que están deteniendo el tránsito vehícular, donde pasaban mil 500 traileres diarios ahora sólo pasan 750”, dijo el presidente de la Confederación Nacional de Transportistas Mexicanos, Elías Dip Ramé.