Al ser víctimas de cobro de derecho de piso, tres de cada 100 empresas cierran sus instalaciones o cambian de ubicación, explicó la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
Destacó que seis de cada 10 empresas tuvieron que aumentar sus gastos en medidas de seguridad, en cámaras, escoltas y protocolos, entre otras acciones.
El Indicador Más Seguridad de #Data Coparmex 2.0, correspondiente al primer cuatrimestre de 2023, mostró que 51.2% ha sido víctima de un delito en el último año, un aumento de 4.3 puntos porcentuales.
Esa cifra es “alarmante” pues representa que uno de cada dos socios de Coparmex ha sido víctima de algún delito, un número mayor al del año anterior.
Los delitos con mayor frecuencia, según los empresarios, son el robo de mercancía, dinero, maquinaria o equipo del negocio en tránsito, con 35%; robo total o parcial de vehículo, 24%; y extorsión o cobro de piso 24%, “por primera vez empata en segundo lugar con robo de vehículos”.
De 24% que dijo sufrir extorsión, se encontró que 74% la sufrió vía telefónica y 26% mediante cobro de derecho de piso. Sin embargo, sólo 21% de los que padecieron estos dos delitos presentaron denuncia, porque desconfían de la autoridad.
“Sabemos que hay empresas que en el momento en que en algún establecimiento les llegan a cobrar derecho de piso, cierran instalaciones”, dijo en conferencia el presidente de la Coparmex, José Medina Mora.
De acuerdo con la encuesta de la Coparmex, de las empresas extorsionadas, 3% indicó que si recibe una solicitud de cobro de derecho de piso prefiere reubicarse y cerrar las instalaciones donde se presentó el ilícito.
En tanto que 80% de los que sufrieron robo de vehículo denunciaron y lo mismo que 62% de los de hurto de mercancía. Sin embargo, aunque se iniciaron carpetas de investigación por robo de autos en 88%, de mercancía en tránsito en 82%, y en extorsiones en 56%, en la mayoría de esos tres delitos no sucedió nada.
Las entidades con mayor porcentaje de delitos en los primeros tres meses del año fueron San Luis Potosí, Zacatecas, Morelos, Sonora y Tlaxcala.
“Los retos permanecen y en algunos casos se agravan, seguimos con una alarmante cifra delictiva porque una de cada dos empresas de Coparmex ha sido víctima de un delito... Sin embargo, el alza de costos de inseguridad no disminuye el interés por invertir, esto quiere decir que las oportunidades como país por la relocalización o nearshoring son mayores”, expuso.