Organismos del sector privado del país lamentaron el control de precios impuesto a las Afore al autorizarse un tope a las comisiones que cobran a sus clientes, como parte de la reforma de pensiones que fue aprobada el miércoles en la Cámara de Diputados y en el Senado.
Se trata de una política inadecuada porque genera distorsiones y perjudica la competencia, dijo al respecto el Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
El organismo expuso que reducir las comisiones no beneficia al trabajador, por lo que sería más conveniente generar mecanismos y condiciones para “que las administradoras inviertan el dinero ahorrado en proyectos prioritarios de infraestructura, que generen mejores rendimientos”.
Mediante un comunicado, el CCE afirmó que con la reforma de pensiones “se incrementa la aportación de los empleadores para beneficiar al trabajador en su retiro. Lamentablemente, se incluyó un tope a las comisiones de las Afore; el control de precios nunca es una política pública adecuada”.
El tema de las comisiones no fue consensuado con el sector privado, destacó el CCE, y el problema es que una política de control “conlleva distorsiones que perjudican a la competencia y, en última instancia, a los trabajadores”.
Para el CCE, lo positivo de la reforma es que la cuota patronal para pensiones que aporta el patrón aumentará gradualmente a partir de 2023 y durante un lapso de ocho años, de manera que el ahorro total pasará de 6.5% a 15%, sin que ello signifique que el trabajador aportará más.
Además, para jubilarse un trabajador necesitará 15 años de cotizaciones, en lugar de 25 años, es decir que en la próxima década se requerirán mil semanas, en lugar de mil 250.
Sobre el tope a las comisiones, el presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM), Luis Niño de Rivera, dijo que “los controles de precios lo único que producen es escasez, una caída en la capacidad de inversión, porque se controlan los precios, pero no los costos, y en el tiempo los márgenes se reducen”.
Agregó que la inversión en investigación y desarrollo se va acabando. “En todos los países y todas las industrias donde ha habido control de precios, el efecto es pernicioso. Es perverso para la economía”, recalcó.
La economía abierta, de competencia con reglas, con un marco de referencia, es lo que mejores resultado ha dado en todos lados, afirmó Niño de Rivera.
En tanto, el director general de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), Recaredo Arias, coincidió respecto a que los controles de precios generan distorsiones en el mercado.
“Hemos vivido épocas de controles de precios que, a la larga, han generado muchos problemas en el funcionamiento correcto y adecuado de la economía. Regresar a este tipo de esquemas es algo que consideramos que no es conveniente”, dijo.
En su opinión, es una lástima que el tope a comisiones no haya podido ser revisado en el Congreso de la Unión, no obstante que hubo muchas reservas al respecto y, además, por una recomendación de la propia Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece), que proponía que se retirara de la reforma el control a las comisiones.
“Todo lo demás tiene elementos muy positivos. Creo que estamos dando un paso muy importante, con un gran esfuerzo por parte de todos los patrones, de todos los empleadores, para llevar del 6.5% al 15% gradualmente durante siete años las aportaciones”, reconoció.