El gobierno federal decidió inyectar 2 mil 800 millones de dólares a la filial de Petróleos Mexicanos, Pemex Transformación Industrial (Tri), que acumula pérdidas en los últimos nueve años por 750 mil 328 millones de pesos.
Durante la Sesión 975 Extraordinaria del Consejo de Administración de la petrolera estatal, con fecha del 25 de junio de 2021, se aprobó la solicitud realizada por Pemex a la Secretaría de Hacienda para que se aporte el monto.
Con estos recursos se espera la reactivación de las actividades de la obra en octubre de este año, luego de que estuvieran suspendidas por limitaciones presupuestarias y por investigaciones de sobornos que involucraban a Odebrecht que había obtenido con ICA el contrato en 2015.
Funcionarios de alto nivel de la petrolera consultados por EL UNIVERSAL explicaron que los recursos de esta capitalización se destinarán a cubrir los requerimientos de inversión del proyecto Aprovechamiento de Residuales en la Refinería Miguel Hidalgo (Tula), estimados en 81 mil 337.4 millones de pesos, de los cuales se prevé erogar en el periodo 2021 a 2023 un monto de 55 mil 76.66 millones; en 2021 se han destinado 21 mil 533.3 millones.
Como parte de la inversión se incluye un monto de 226.6 millones de dólares de obra ejecutada. (4 mil 727.48 millones de pesos). El monto de inversión, incluyendo costos de operación y mantenimiento por 30 años, es de 575 mil 916.2 millones de pesos.
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De acuerdo con el escenario oficial, con esta inyección de capital se espera la reactivación de los trabajos de la obra en octubre, trabajos asignados a ICA.
El proyecto fue presentado a la Unidad de Inversión de la SHCP en 2013 con clave de cartera 1318T4M0065, con costo total de 575 mil 916.2 millones de pesos.
Para el 17 de mayo de este año, el gobierno, a través de la Subdirección de Proyectos Industriales de Pemex Tri, presentó la actualización del proyecto costo-beneficio en el que se reconoce que en el actual esquema de procesamiento, “35% de la corriente de alimentación se convierte en combustóleo, producto de difícil manejo, por lo que su producción impacta negativamente el margen variable de la refinería al consumir insumos intermedios que podrían emplearse en productos de mayor valor”.