México tiene el mayor potencial para aprovechar el reacomodo de cadenas productivas o nearshoring; sin embargo, debe contar con suficiente energía eléctrica.
El corredor inmobiliario Cushman & Wakefield señaló que hace falta inversión en líneas de transmisión y el costo por derechos de kiloamperio (KVA) cada vez es más elevado debido a que el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) solicita a los interesados en conectarse a la red que realicen obras complementarias para reforzar la red y buscar redundancias; además de la dependencia en la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
“La energía eléctrica es más cara que en Estados Unidos y esto quiere decir que no tenemos ventaja competitiva en ese rubro. Si una empresa llega a Estados Unidos y solicita energía a algún proveedor, éste es quien proporciona la línea e instala el transformador, asumiendo costos, y cobra la energía a precio más competitivo que en México.
“Si esa misma empresa llega a nuestro país, aquí la empresa es quien asume el pago de la línea eléctrica, el transformador y, además, tiene que pagar la energía a mayor costo”, dijo Enrique Portillo, director ejecutivo de Corretaje Industrial en Cushman & Wakefield.
Debido a esto, el ahorro en la mano de obra disminuye si se suma el costo en energía, para la cual únicamente está disponible un proveedor: la CFE.
Cushman & Wakefield destacó que, en el sector industrial, cerca de 50% del consumo energético es la electricidad, ya que se emplea para impulsar motores y aparatos específicos, calentar el contenido de tanques, depósitos y calderas.
La compañía destacó que el problema en el país con la energía eléctrica no es su generación, sino la infraestructura en líneas de transmisión.
“En requerimientos mayores a 5 mil KVA, las empresas de manufactura deben instalar su propia subestación, cuyo costo es sumamente alto y generalmente lleva más de un año el trámite e instalación ya que depende del Cenace y CFE, lo que pone en una posición muy delicada a aquellas empresas que requieren iniciar operaciones rápidamente”, comentó Leticia Valenzuela, directora senior Industrial en Cushman & Wakefield.