Analistas externaron su preocupación por los bajos niveles de inversión, principalmente en la industria de la construcción.
De acuerdo con el Inegi, la inversión total creció 10.3% el año pasado, tras hundirse 17.8% en 2020, es decir, el rebote fue insuficiente para compensar el desplome por la pandemia.
El capital productivo ya venía disminuyendo desde 2019, debido en parte al cambio de gobierno, pues diversos proyectos públicos y privados tienden a detenerse en espera de los lineamientos de la nueva administración.
La inversión total se encuentra 13.9% por debajo del alcanzado en 2018, previo al cambio de gobierno. También fue 14.2% menor a su máximo histórico, registrado en 2016. Sin tomar en cuenta a 2020, el capital registró en 2021 su nivel más bajo de los últimos 11 años.
El menor dinamismo de la inversión se registró en la construcción, con un incremento de apenas 5.6%, de modo que su nivel se mantiene 15.5% por debajo del alcanzado en 2018.
En específico, el capital destinado a obras de construcción de viviendas se incrementó 6.7% el año pasado, y la inversión en construcción no residencial, relacionada al gasto público, aumentó 4.5%; en ambos casos hay un rezago de 10.9% y 20.0%, respectivamente, frente a los niveles que se tenían dos años antes.
Tras conocer los resultados, analistas de Banorte opinaron que el panorama sigue siendo complicado, especialmente para la inversión en construcción.
“Continuamos especialmente preocupados por la construcción”, externaron en el banco.
El presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), Francisco Solares, dijo que esperan un crecimiento de entre 3% a 5% del sector este año, ayudado por un mayor gasto del gobierno federal en infraestructura.
La organización identificó una alta concentración de proyectos que no beneficia a las empresas pequeñas y medianas, además de una baja participación del sector privado en las obras prioritarias del gobierno.
Además, estimó que al menos 2 mil 500 empresas han cambiado de giro desde 2018, debido a la pandemia, la menor inversión pública y privada en infraestructura, y el otorgamiento de obras de gobierno al Ejército.
En Banorte prevén que el crecimiento de la construcción en 2022 será insuficiente para revertir la caída acumulada desde que inició la pandemia.
“Aunque aún existen oportunidades atractivas para el sector privado en parques industriales, logística y manufactura ligera, la inflación en el costo de materiales, mayores costos de transporte e incremento en las tasas de interés también son importantes vientos en contra para la construcción”, dijeron en el banco.
En diciembre, Alfonso Carrillo Silva, encargado de Información y Estadística de la CMIC, comentó que las constructoras cerraron debido a que ya no tenían capital para mantenerse y suspendieron sus actividades por falta de inversión y trabajo.
“Es el equivalente a lo que una empresa grande podría hacer [en concurso mercantil] por su cartera, cuentas y accionistas… Son empresas familiares y el proceso es cerrar y buscar otro ingreso para subsistir”, detalló.
Maquinaria y equipo
El sector que logró el mayor repunte en inversión fue la adquisición de maquinaria y equipo, cuyo crecimiento fue de 16% el año pasado, pero aún se encuentra 11.7% por debajo del nivel reportado en 2018.
En particular, la inversión canalizada a maquinaria y equipo importado se incrementó 18.6%, aunque todavía está 10.4% por debajo del nivel observado previo a la llegada de la actual administración federal, según el Inegi.
“La inversión continúa siendo el talón de Aquiles de la economía mexicana, pues de todos los componentes de la demanda agregada es el que aprovechó menos el rebote inercial tras la reapertura de la economía y se constituye como la principal atadura para el avance integral de la economía”, comentó Daniel Arias, analista económico de Monex.
El Inegi también informó ayer que el consumo privado en el país rebotó 8.2% en 2021, lo que fue insuficiente para compensar el desplome de 11.1% en 2020.
El consumo se situó 3.8% por debajo del nivel alcanzado en 2019, el máximo en registro.