La producción industrial se expandió por sexto mes seguido en noviembre pasado, pero a menor ritmo que en octubre y de forma desigual, pues minería y construcción avanzaron, manufactura se estancó y servicios públicos cayó.
El indicador de la actividad industrial reportó un crecimiento mensual de 1.1% en noviembre de 2020, informó el Inegi, añadiendo seis meses al alza desde la reapertura de la economía, aunque todavía 3.4% por debajo del nivel registrado en febrero pasado, previo a la pandemia.
Por componentes, la construcción fue el que mostró el mejor desempeño, con un crecimiento mensual de 2.2% en noviembre, pero continúa como el sector más débil respecto a los niveles prepandemia, casi 8.3% debajo de febrero.
La minería avanzó 0.1%, el rubro petrolero presentó una ligera caída de 0.2% con posibles disrupciones ante condiciones climáticas adversas en el periodo, situación que también se reflejó en las cifras de producción de Pemex.
El sector no petrolero nuevamente fue más fuerte, con un incremento de 0.6%, apoyado por la demanda global.
Otros factores que incidieron en el debilitamiento de la producción manufacturera fueron los retrocesos en la exportación e interrupciones asociadas al bloqueo de vías férreas; sin embargo, sigue como la actividad más adelantada a partir de junio. .
Los servicios públicos que comprenden la generación, transmisión y distribución de energía eléctrica, suministro de agua y gas por ductos disminuyó 2.3%, su segunda caída desde junio pasado cuando inició la reapertura.
“Dado que hasta ahora la industria ha sido el motor de la recuperación en México, su probable estancamiento en diciembre y enero supone un riesgo para las perspectivas de corto y mediano plazos”, advirtió Daniel Arias, analista económico de Monex.