La compañía española Iberdrola amenazó con dejar de invertir en México si el gobierno de la Cuarta Transformación no aclara las políticas que aplicará a empresarios extranjeros.
El presidente de la firma, Ignacio Sánchez Galán, dijo que las autoridades mexicanas deben dejar claro si están dispuestas a recibir inversiones privadas y foráneas, porque de ser así “podemos ir adelante”, pero en caso contrario no se harán más.
“No vamos a iniciar nada salvo que el gobierno decida que quiere aclarar este tipo de políticas, si dice que no quiere que inviertan inversores [sic] extranjeros no lo haremos y si quiere lo contrario estableceremos un marco razonable como lo hemos hecho hasta ahora”, dijo durante la Presentación de Resultados de Iberdrola, Sánchez Galán.
El representante de la firma europea dijo que las inversiones en el mercado mexicano son pequeñas con relación a las que hacen en otros países.
Las diferencias entre Iberdrola y el gobierno mexicano comenzaron en 2019, cuando la Comisión Federal de Electricidad (CFE) anunció la intención de revisar los contratos de gas natural con empresas, entre ellas la española, principal productora privada en México.
Tras ese primer conflicto, la empresa energética anunció el 24 de junio de 2020 pasado la cancelación del proyecto de inversión de la central eléctrica de ciclo combinado en Tuxpan, Veracruz, por mil 204 megawatts en la que iban a invertir mil 200 millones de dólares.
En respuesta, el presidente Andrés Manuel López Obrador acusó a Iberdrola de poseer la mitad del mercado de generación eléctrica privada en el país.
“En el caso de Iberdrola tengo información que son ellos los que están promoviendo esta campaña, nada más que encubiertos” en los medios de comunicación contra las políticas energéticas del gobierno.
De acuerdo con datos de la firma española, por las operaciones en México incrementó sus ingresos antes de intereses, impuestos, depreciaciones y amortizaciones (EBITDA) de 2.4 millones de dólares entre enero y septiembre de este año, con lo que llegaron a 642 millones, sobre todo por el incremento en la producción y la nueva capacidad instalada en generación.
Nuevo revés a Nahle
La Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) anunció que, por el momento, la política energética publicada el 15 de mayo por la secretaria de Energía, Rocío Nahle, no puede entrar en vigor.
Durante la sesión de este miércoles, los integrantes de la Primera Sala informaron la suspensión concedida por el ministro Luis María Aguilar el pasado 25 de junio, en la controversia constitucional presentada por la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) contra el acuerdo de Política de Confiabilidad, Seguridad, Continuidad y Calidad en el Sistema Eléctrico Nacional (SEN), publicado por la Sener.
La Cofece impugnó el acuerdo porque afirmó que la secretaría invadió sus atribuciones al regular temas de libre competencia y concurrencia en el sector energético. Además, acusó que impone a las energías renovables reglas que dificultan su competencia con las fuentes de energía tradicionales.
Por unanimidad, los integrantes de la Primera Sala avalaron la decisión del ministro Aguilar Morales y declararon infundado el recurso de reclamación con el que la Consejería Jurídica de la Presidencia, buscaba revertir la suspensión concedida a la Cofece.
El acuerdo de la Sener impide el ingreso de energías renovables al país, pero con la resolución de la Sala, ya no podrá ser ejecutada, pues ahora la suspensión permanecerá vigente hasta que el pleno de la Corte resuelva el fondo del litigio planteado por la Cofece, lo que puede ocurrir hasta el próximo año.
La medida concedida por el ministro Aguilar Morales se sumó a las decenas de suspensiones concedidas por jueces de amparo en la Ciudad de México contra la política energética de la secretaria Nahle.